Un jurado popular ha declarado culpables de asesinato a la viuda y al hijo del empresario de la localidad cacereña de Logrosán, Alfonso Triguero, fallecido en febrero de 2011 a causa de un disparo.

Los miembros del jurado, después de horas de deliberación, han señalado que madre e hijo actuaron en connivencia y decidieron acabar con la vida del empresario, que murió a consecuencia del disparo que hizo su hijo con una escopeta. 

Alfonso Triguero, propietario del asador "El cortijo del jamón", fue asesinado en su propio domicilio mientras dormía. El empresario recibió varios disparos provocados con su propia escopeta. Las puertas de acceso a la vivienda no estaban forzadas.

 Triguero fue asesinado hacia las 3.30 de la madrugada cuando se encontraba en el interior de su vivienda junto a su familia y murió varios minutos después de recibir los disparos, cuando era trasladado en ambulancia a un centro hospitalario.