El Gobierno de Extremadura destaca el buen clima de negociación que se ha mantenido en las reuniones con los grupos parlamentarios de la Asamblea de Extremadura, que se iniciaron a las 11 y media de la mañana con el grupo socialista, seguido del grupo popular y con IU-Verdes-SIEX, que se ha celebrado en la tarde de ayer.

Desde el Ejecutivo extremeño se manifiesta el agradecimiento a los grupos parlamentarios que han estado abiertos al diálogo, en un tono cordial aunque, de momento, la negociación sigue abierta y no se han alcanzado puntos de encuentro concretos o definitivos.

El Gobierno de Extremadura ha ofrecido a las tres fuerzas políticas avanzar en una serie de acuerdos que amplían las propuestas hasta ahora abordadas en los contactos anteriores. Por un lado, el Gobierno ha propuesto abrir una negociación sobre los gastos, transferencias corrientes y sobre las inversiones, una medida de impacto directo en el Presupuesto regional.

Por otra parte, el Ejecutivo ha planteado también medidas de impacto indirecto en el desarrollo presupuestario y que incidirán en la ejecución de las cuentas regionales, como son las propuestas de negociación sobre un Plan de Enajenación de Patrimonio, un Plan de Simplificación y Austeridad administrativas y, por último, la constitución inmediata de la Oficina de Control Presupuestario.

Sobre el primer punto, el Ejecutivo ha planteado a los grupos parlamentarios abrir una negociación para que se alcance un acuerdo sobre qué patrimonio es susceptible de ser enajenado por el Gobierno de Extremadura. Esta oferta trasciende a la propuesta de enajenación de viviendas sociales e incluiría todas las partidas de patrimonio público que se estimen oportunas por consenso.

En segundo lugar, el Gobierno extremeño ha ofrecido un Plan de Simplificación y Austeridad administrativas, que desarrolla uno de los puntos contemplados en el Pacto Social y Político de Reformas para Extremadura, un aspecto que incidiría especialmente en la eficiencia y eficacia del gasto público.

Y, en tercer lugar, y también dentro del bloque de medidas de impacto presupuestario indirecto, el Gobierno de Extremadura ha propuesto a los grupos parlamentarios un acuerdo para impulsar la constitución de la Oficina de Control Presupuestario en el Parlamento. Se trata de un compromiso también vinculado a la propia reforma del Estatuto de Autonomía de Extremadura y sería un organismo independiente, neutral y sin costes adicionales. Supervisaría el presupuesto y dispondría de información continua sobre déficit, deuda (incluida deudas a proveedores) y ejecución presupuestaria.

Además de estos acuerdos, el Ejecutivo ha abordado pormenorizadamente con los grupos parlamentarios socialista e IU-Verdes-SIEX el contenido de sus enmiendas de totalidad. En este sentido, el Gobierno extremeño ha ofrecido negociar una a una las cuestiones específicas recogidas en cada enmienda a la totalidad con el fin de llegar a acuerdos en cada una de ellas, planteando como único límite el no incrementar ficticiamente los ingresos.

Desde el Gobierno de Extremadura se quiere incidir en la necesidad de subsanar en 2012 los desequilibrios de los presupuestos de 2011 (170 millones de euros que no se recaudaron en concepto de deuda histórica o 98 millones de euros de enajenación de vivienda), con el objetivo de recuperar la confianza y de corregir desequilibrios, no de profundizar y avanzar en ellos.