El Presidente del Gobierno de Extremadura, José Antonio Monago, ha estado presente en la entrega del Premio Patrimonio 2011 en Cáceres a la localidad de Morella, otorgado por el Grupo de Ciudades Patrimonio de la Humanidad. Este premio, en palabras de Monago, "reconoce el esfuerzo que, tanto desde el Ayuntamiento como por parte de los ciudadanos, habéis realizado a favor de la recuperación y conservación de vuestro patrimonio cultural".

En su intervención, el Presidente regional ha deseado a la ciudad de Morella que este galardón sirva para que la localidad castellonense consiga el reconocimiento por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad. Una ciudad que ha conservado "en un estado intacto el tesoro cultural que alberga en su interior", a lo que el Presidente Monago ha añadido que tanto Morella como ciudades como Mérida o Cáceres, poseedoras del título de Patrimonio de la Humanidad, "han sabido reinventarse una y otra vez para seguir formando parte de la Historia".

El jefe del ejecutivo extremeño ha valorado la singularidad patrimonial que tiene nuestra región, "la UNESCO nos ha señalado en el mapa internacional como lugares Patrimonio de la Humanidad". Desde el Gobierno de Extremadura se trabaja para preservar "este legado para las generaciones futuras", pero también se trabaja para ponerlo en valor, "porque la cultura y el patrimonio también son recursos generadores de empleo".

Por otro lado, Monago ha señalado a Cáceres como ejemplo del turismo que debe desarrollar Extremadura, "un modelo de turismo que no deje escapar al visitante y que convierta a Extremadura en un lugar preferente para visitar". Y en la búsqueda de un turismo de calidad y la excelencia del patrimonio, el Presidente extremeño ha afirmado que el Gobierno de Extremadura está "centrando nuestros esfuerzos en la elaboración del primer Plan General de Bienes Culturales de Extremadura".

Este nuevo proyecto que permitirá racionalizar y perfeccionar las actuaciones de la Administración relacionadas con el patrimonio histórico, servirá según el propio Monago para "fijar nuevos objetivos acordes con los nuevos tiempos y con la normativa vigente" en materia de cultura.