Un plan especial de vigilancia en la zona de la ermita de la Virgen de la Vega, en la finca Santa María, intentará evitar los intentos de robos que habitualmente se producen en el santuario de la patrona de Moraleja. La cofradía de la Virgen de la Vega ha demandado esta semana actuaciones concretas a los dirigentes municipales y a las fuerzas del orden ante el último robo, el cuarto este año, que ha ocasionado graves desperfectos en la entrada y en el interior del edificio.

El vicepresidente del colectivo, Narciso Mateos, indicó que es urgente que se dé una solución a esta problemática, y especialmente ha pedido la implicación del ayuntamiento ya que consideran que es un problema de todo el pueblo.

El concejal de Seguridad Ciudadana, Rubén Blanco, ha manifestado por su parte que el consistorio mantiene un contacto directo con las fuerzas del orden aunque reconoce que no es fácil cubrir la vigilancia única y exclusivamente en este paraje durante toda una noche.

El Ayuntamiento de Moraleja ha lamentado este nuevo suceso que ha ocasionado destrozos en las cerraduras, puertas y el interior de la capilla, donde incluso los ladrones han picado la pared y han hecho un butrón para intentar abrir la caja fuerte.