Las cooperativas apícolas de la región, a través de la Sociedad de segundo grado Cooperativa Euromiel, están participando en un proyecto de I+D+i para evitar que la miel se cristalice y hacerla más atractiva para el consumidor. De este proyecto de investigación se beneficiarán las dos cooperativas apícolas del norte cacereño: Sierramiel y Apihurdes, que junto con Montemiel, de la comarca pacense de La Serena, forman la sociedad de segundo grado. El presidente de Apihurdes, Anastasio Marcos, que a su vez es vicepresidente segundo de Euromiel, indicó que con esta iniciativa, en la que se invierten más de 80.000 euros, también se intentará modificar la textura del polen para hacerla más atractiva al paladar del consumidor.

Por otra parte, el responsable de la cooperativa apícola hurdana, indicó que Caminomorisco podría contar con una Agrupación de Defensa Sanitaria (ADS) en la que varios veterinarios podrían vigilar y analizar la cabaña apícola para evitar el síndrome del desabejamiento. Un problema que ocasiona una pérdida de hasta el 25% de las abejas y de la que se desconoce aún el origen, aunque podría estar relacionado con algún componente ambiental.

De cara a la temporada de primavera, las expectativas son positivas, según Marcos, después de los períodos de sequía que se han vivido en el último año. Aunque el responsable de Apihurdes indicó que el invierno está siendo muy tardío y duro, aunque confían en una buena primavera con una abundante floración