El pleno ordinario del mes de noviembre en Moraleja celebrado este viernes en la casa de Cultura y que contenía 13 puntos en el orden del día ha estado marcado por la polémica. Minutos después de comenzar la sesión plenaria, el concejal socialista Antonio García Granado era expulsado por la presidenta, Concepción González, quien invitó al edil a abandonar la sala.

 

La sesión continúo con normalidad hasta el punto número cinco en el que se trataba la opción de instar a la Junta de Extremadura de manera urgente para que dote de mobiliario al centro de día que está construido en la localidad de Moraleja desde julio de 2008. Tras la intervención del concejal socialista, Felipe Mayoral, la presidenta decidió no conceder el turno de palabra a la portavoz socialista, Teresa Roca, un hecho que desencadenó en una discusión con descalificaciones de por medio por ambas partes. Tras la disputa, Teresa Roca y Felipe Mayoral fueron expulsados de la sesión plenaria, decidiendo los dos concejales socialistas restantes abandonar también la sala de manera voluntaria.

 

Teresa Roca acusó a la alcaldesa de Moraleja de exhibir una "actitud dictatorial". La regidora, en cambio, destacó que la postura del Partido Socialista con los enfermos de alzheimer cediéndoles su sude obedece a una política "partidista, sucia y vil", por el hecho, dijo, de jugar con estar personas e intentar "arañar votos a personas que viven una situación desesperada".

 

Antes de que los socialistas abandonaran la sala, el pleno aprobó con el voto positivo de los tres partidos la iniciación de los trámites necesarios para la cesión de terrenos para la ampliación del instituto Jálama, no sin antes polemizar sobre el tema. La portavoz socialista aseguró que este asunto era una iniciativa del Partido Socialista, mientras Concepción González respondió que es éste es un tema promovido por la administración regional y no por el partido socialista.

 

La sesión ha servido también para aprobar el pliego de condiciones para la recogida y traslado de residuos sólidos urbanos en el término municipal de Moraleja, después de que la Mancomunidad de Municipios de Sierra de Gata suspendiera este servicio en el mes de agosto. El servicio tiene presupuestado un montante económico que asciende a 1,7 millones de euros, a repartir en 10 años con dos prórrogas de un año cada una.

 

En la sesión se aprobó también la comisión especial de la planta termosolar, así como la composición de la misma, en la que habrá representación de los tres partidos representados en el Ayuntamiento con tres concejales del Partido Popular, dos del Partido Socialista y uno de Ipex, representado en la figura de Jaime Vilella., que será además quien presida esta comisión.

 

La alcaldesa expresó su malestar por los impedimentos que el Gobierno regional está poniendo a la hora de construir esta planta.

 

El pleno ordinario abordó otros asuntos como el nombramiento de Ciudadanos Ilustre a Isidoro Macías Casado, párroco de la iglesia de Nuestra Señora de la Piedad, una decisión que tendrá que ser ratificada dentro de 30 días en la próxima sesión plenaria.