El Womad 2008 ya es historia. El festival multiétnico cerró ayer su decimoséptima edición con el balance positivo de los organizadores, la ausencia total de incidentes durante la madrugada del domingo en el casco antiguo y la garantía del ayuntamiento y la Junta de que habrá otra edición más en el 2009.

Antes de que un pasacalles cerrara ayer el programa, la música había sonado hasta las dos y media de la madrugada en la plaza Mayor, sin que la lluvia caída el sábado fuera un obstáculo para la masiva afluencia a los escenarios por la noche. Un año más, la cita con las músicas del mundo convirtió el centro en una fiesta. Bares vendiendo sin parar, espectadores de todas las edades disfrutando del ambiente, en especial, los jóvenes que aprovecharon la última noche del festival para repetir la escena del jueves y el viernes: la plaza Mayor como templo del botellón . Tendrán que esperar al próximo evento especial si quieren volver a hacerlo y nadie podrá dudar a estas alturas del impacto económico que provoca Womad en el centro.

La "absoluta normalidad" que marcó la última noche, con una afluencia de unas 20.000 personas, según el balance ofrecido ayer por el ayuntamiento, se mezcló con la satisfacción municipal por el formato adoptado este año, con escenarios en las plazas Mayor, San Jorge y Las Veletas y conciertos en fin de semana y hasta la madrugada. "Ha sido todo un éxito", declaró ayer a este diario la alcaldesa, Carmen Heras, dando por segura la celebración de la próxima edición del festival en el 2009. "Los compromisos que adquirió Womad se han cumplido en términos generales", subrayó, coincidiendo con la consejera de Cultura, Leonor Flores, que también dio por hecho que Womad repetirá. El acuerdo firmado con el sello internacional contemplaba renovar un año más si se cumplían las mejoras acordadas este año.

En cuanto al formato, el ayuntamiento y la Junta también están de acuerdo en que se mantenga en fin de semana. En este sentido, Heras apuntó que el gobierno municipal "estaba en lo razonable y en lo que la gente quería" cuando defendió este cambio. "Es más complicado para organizarlo porque trae más público y, por tanto, hay que cuidarlo mucho más desde todos los puntos de vista", aseguró. Para Flores, sería necesario arbitrar algún sistema para evitar que el público pueda acceder con vidrios al recinto del festival.

 

CON ANTELACION Ambas también se mostraron partidarias de preparar el festival con más tiempo para poder tener un cartel artístico con la mayor calidad posible. La consejera apuntó que el de este año ha estado "bien", aunque se haya contado con menos de un mes para cerrarlo, y añadió que "a la mayoría de la gente le ha gustado". Flores indicó que el espacio de comidas del mundo en San Mateo había sido "un gran éxito" y propuso que en la próxima edición se amplíe la capacidad de los talleres infantiles para poder atender toda la demanda.

Heras aprovechó para agradecer el trabajo realizado por los equipos de limpieza de Conyser y de emergencias (bomberos, Cruz Roja, ARA, DYA y policía) y reiteró que las incidencias han sido mínimas, "no mayores que en un sábado ordinario. Por último, incidió en que "Cáceres quiere al Womad" y destacó que la convocatoria haya servido para reunir "a gente de todo tipo de edad y de cultura".

Por su parte, Isidro Timón, director del Gran Teatro, abogó por mantener el mismo formato y destacó como factores más positivos la "distribución" de los escenarios en el casco antiguo y de los mercados en la plaza de Santa María y el paseo de Cánovas, además de la señalización, que ha permitido que el público se moviera con mayor fluidez.