La Diputación de Cáceres quiere tener listo antes del verano el listado de carreteras en peor estado que se encargarán de arreglar empresas mediante la concesión de obra pública. Este sistema, para el que se ha tomado como modelo a la Diputación de Toledo, pretende agilizar las actuaciones en la red viaria provincial pagando a las empresas en 25 o 30 años y reduciendo los plazos de ejecución de las obras.

Según explicó el diputado de Fomento, Miguel Angel Morales, la concesión de obra pública supondrá que las inversiones en carreteras puedan triplicarse o cuadruplicarse en los próximos cuatro o cinco años: "Lo que hace la empresa es arreglar los 200 o 300 kilómetros de carreteras en seis años. Hace una inversión para quedarlos en perfecto estado". De otra manera, añadió, sería inviable ya que "tendrían que pasar 15 o 20 años para que la diputación pudiera llegar a esos niveles de inversión".

Morales indicó que los ciudadanos "van a notar que se van a arreglar en menos tiempo muchos más kilómetros de carreteras. A las empresas se les va a pagar en 25 o 30 años, con la ventaja de que la Administración no se endeuda". Morales añadió que la experiencia de Toledo "ha funcionado bien", donde ha visitado obras, además de reunirse con empresas interesadas en trabajar con la diputación provincial.

Asimismo, recordó que se trata de una iniciativa novedosa en la institución y "una garantía" para las empresas al tener un contrato público durante 25 o 30 años. "Eso le da una estabilidad financiera", subrayó Morales, que precisó que "no todas podrán hacerlo ya que necesitarán el aval del banco que les adelante el dinero para invertir en las carreteras adjudicadas".