El Ayuntamiento de Moraleja ha presentado a la Junta de Extremadura un proyecto para levantar un nuevo puente sobre la Rivera de Gata a su paso por la localidad.

El equipo de Gobierno, del Partido Popular, considera que la medida es "urgente y necesaria" dada la situación que ha generado el actual paso sobre el río que recientemente fue reformado por el Ministerio de Vivienda. La alcaldesa, Concepción González, criticó que tras las obras ejecutadas no es posible que dos coches circulen de forma simultánea por el actual puente, ni tampoco que los peatones usen este paso cuando hay un vehículo en circulación. "Es una auténtica chapuza", insistió González.

El proyecto elaborado por el consistorio prevé levantar un nuevo puente desde las inmediaciones del centro de salud del municipio y junto a la zona comercial de Moraleja. Se trata del espacio sobre el río Rivera de Gata que durante varios años se ha habilitado para permitir el paso de las reses bravas en los tradicionales encierros de las fiestas de San Buenaventura. El plan contempla un paso amplio, que "permita una perfecta circulación de coches en ambos sentidos con total seguridad" y contará con un espacio para que los peatones puedan atravesar el puente, aunque haya vehículos circulando. En la actualidad, en el único puente que hay sobre el río y que parte del casco urbano de Moraleja no es posible que dos coches pasen de forma simultánea, ni tampoco es factible que coches y peatones lo atraviesen a la vez.

De hecho, no todos los vehículos pueden pasar por esta infraestructura porque el ancho máximo permitido es de 1,85 metros. "La estrechez del puente está ocasionando graves problemas a los ciudadanos y al tejido comercial de Moraleja", manifestó la alcaldesa, quien insistió en la urgencia de dotar a la localidad de un nuevo paso.

 En cuanto a las obras de reforma ejecutadas en el puente, el ayuntamiento todavía no ha recepcionado las obras porque "son una verdadera chapuza". González anunció que están a la espera de que el Ministerio de Vivienda subsane los fallos que se han detectado y que el consistorio ya notificó hace meses.