El Grupo de Empresas Agrarias (GEA) de Extremadura se opone al recorte de ayudas directas agrarias de hasta el 45 por ciento que plantea la Comisión Europea. Según informa El Periódico Extremadura, para la organización profesional agraria, este posible recorte "no tiene sentido" ante la situación actual de la producción y el comercio mundial, en un continente como el europeo que "se enfrenta a un reto incontrolable que es la evolución cada vez más desmesurada de los precios agrícolas". Consecuentemente, para GEA-Extremadura, el sector primario y sus empresarios están en situación de "catástrofe económica", con "pérdidas millonarias" en sectores como la ganadería.

Ante esta situación, el colectivo considera que cualquier retirada de fondos de los pagos compensatorios, aunque sea mínima, "acabará con las 2/3 partes de las explotaciones ganaderas y agrícolas del país". Por ello, resalta su apuesta por la producción, por mantener el equilibrio, la independencia y seguridad alimentaria, y reclama que a los empresarios agrarios en activo produciendo se les garanticen los precios rentables y se les ayude a organizarse mejor. "Las empresas agrarias que mantengan la despensa, no se les puede recortar los pagos compensatorios".

Finalmente, el colectivo agrario apostilla que el MAPA "tendrá que preocuparse más de controlar los productos que entren de estos países, donde no existe la trazabilidad, ni el respeto al medio ambiente, ni a las normas alimentarias y posicionarse ante la Comisión Europea" para que el "chequeo médico" no acabe siendo exclusivamente "un certificado médico de defunción del sector agrario en España".