La Guardia Civil ha instruido diligencias como investigado a un vecino de la comarca pacense de Sierra Suroeste, empleado de Correos, como presunto autor de un delito de apropiación indebida tras detectar la desaparición de 51 envíos de paquetería, cuyo contenido habría vendido posteriormente a través de plataformas digitales de compraventa.
La investigación se inició el pasado mes de abril, tras la denuncia del coordinador de seguridad de la Zona Centro de Correos, quien alertó de la desaparición de decenas de paquetes que, aunque habían sido enviados desde Mérida, nunca llegaron a registrarse en una oficina postal de la comarca. Entre los objetos sustraídos se encontraban al menos seis terminales móviles.
A partir del rastreo de uno de estos teléfonos, los agentes lograron localizarlo en León, donde estaba siendo utilizado. La persona que lo tenía lo había adquirido en internet a un precio muy inferior al de mercado, lo que permitió a la Guardia Civil identificar al vendedor: un trabajador de la empresa postal y vecino de la comarca extremeña.
La investigación reveló que este empleado, aprovechando su acceso directo a los paquetes, seleccionaba los envíos según su tamaño y aspecto, y omitía su registro en la oficina de recepción, quedándoselos sin dejar rastro documental. Posteriormente, los ponía a la venta online de forma casi inmediata.
El análisis de sus cuentas bancarias y de usuario en varias plataformas digitales confirmó que había realizado ventas a distintos puntos de España y de otros países europeos, lo que refuerza la hipótesis de que actuó de forma continuada durante varios meses. El valor estimado de la mercancía sustraída asciende a unos 50.000 euros.
Las diligencias, tramitadas en dependencias de la Guardia Civil, han sido entregadas ya en el Juzgado de Instrucción de Fregenal de la Sierra, que se hará cargo del caso.