Detenido un hombre como presunto autor de la muerte de su pareja de 34 años
La víctima había estado incluida anteriormente en el sistema VioGén, aunque en el momento actual no existía causa activa de seguimiento por violencia de género.
Una mujer de 34 años, madre de varios hijos menores de edad y vecina de Don Benito, ha sido hallada muerta en la noche del lunes en las inmediaciones de la calle Canalejas. El hallazgo se produjo después de que se denunciara su desaparición el 30 de junio, y la Policía Nacional ha abierto una investigación, de lo que podría ser un nuevo caso de violencia machista en Extremadura.
El cuerpo fue encontrado en una zona de pastos situada tras un camino secundario. Hasta el lugar se desplazaron efectivos de la Policía Nacional de la comisaría de Don Benito-Villanueva, que mantuvieron la zona acordonada durante varias horas en la madrugada. La víctima había estado incluida anteriormente en el sistema VioGén, aunque en el momento actual no existía causa activa de seguimiento por violencia de género.
La investigación ha derivado en la detención de un hombre de 41 años, pareja de la víctima, como presunto autor del crimen. El sospechoso fue quien denunció inicialmente la desaparición de la mujer y permanece bajo custodia policial, a la espera de pasar a disposición judicial en las próximas horas. Tanto él como la víctima residían en Don Benito.
De confirmarse la naturaleza machista del crimen, se trataría del segundo asesinato por violencia de género en Extremadura en lo que va de 2025. El anterior tuvo lugar el mes de mayo en Aldeanueva del Camino (Cáceres), donde María Varela Piñero, de 38 años, fue asesinada por su pareja, Javier Gil González, con quien tenía un hijo en común. El hombre la acuchilló brutalmente y después la arrojó por el balcón de la vivienda que ambos compartían. Posteriormente, se autolesionó y fue detenido tras ser ingresado en el hospital.
Aquel crimen conmocionó a toda la comarca del Valle del Ambroz y a la región, no solo por su violencia, sino por el hecho de que no existían denuncias previas ni la víctima estaba bajo seguimiento por violencia de género. En ese caso, la justicia ha dictado prisión provisional para el acusado, se ha decretado la suspensión de la patria potestad sobre el menor, y se le ha prohibido cualquier tipo de contacto o aproximación a menos de 500 metros del mismo.