El Sindicato de Enfermería SATSE ha denunciado que los hospitales y centros de salud de Extremadura están sufriendo situaciones de colapso, sobrecarga asistencial y deterioro en la calidad del servicio debido a la escasez de enfermeras durante el verano.

Según la organización sindical, la falta de una planificación adecuada para cubrir las ausencias del personal sanitario en periodo vacacional, unida a los recortes estacionales habituales, está generando “multitud de problemas” tanto para los pacientes como para los propios profesionales. 

SATSE advierte de que esta situación afecta especialmente a los servicios de urgencias y unidades de hospitalización, donde se están registrando esperas de hasta 48 horas para conseguir una cama en planta, lo que obliga a doblar boxes y a ubicar hasta tres pacientes en habitaciones diseñadas para dos.

SATSE asegura que no se están sustituyendo entre el 40 y el 50 por ciento de las enfermeras que se ausentan por vacaciones, enfermedad o baja laboral, lo que incrementa la carga de trabajo del personal que permanece activo. 

Además, se están denegando permisos de descanso o necesidades familiares a las profesionales en activo, lo que agrava aún más el desgaste físico y emocional del colectivo.

El sindicato también denuncia el cierre de camas hospitalarias durante el verano y la dispersión de pacientes de distintas especialidades por todo el hospital, incluso en unidades que no cuentan con los recursos ni la experiencia adecuados para su atención. Esta desorganización asistencial, advierten, pone en riesgo la seguridad y la calidad del cuidado sanitario en la comunidad autónoma.

SATSE ya había alertado antes del verano de las consecuencias que tendría la política de recortes en personal y recursos adoptada por las administraciones sanitarias, reclamando una cobertura real y planificada que garantice la atención a la ciudadanía extremeña durante los meses estivales.