La empresa pública Tragsa asumirá los trabajos de limpieza y deslodado del cauce, paso previo fundamental para frenar la proliferación del nenúfar.
El objetivo es conseguir la supresión de los focos de estas dos plagas consideradas prioritarias en la Unión Europea (UE), además de prevenir su aparición en la zona de riesgo, para lo que se dispone de un presupuesto de 211.591,17 euros.