La actuación aumentará y renovará el espacio de la estación para los viajeros, rehabilitará y pondrá en valor el edificio histórico que la alberga, de arquitectura ferroviaria, y reforzará su integración en la ciudad con una nueva plaza de acceso.
Con este nuevo servicio de Alvia habrá, por primera vez, una parada en Plasencia, ya que hasta ahora todos los trenes que usan la electrificación se detienen en la estación de Monfragüe, a 15 kilómetros de distancia y Renfe debe fletar autobuses desde la ciudad placentina para la recogida de los pasajeros.