Los restos de huesos analizados corresponden al menos a once individuos que presentan evidencias claras de haber sido despellejados, descarnados, desarticulados, fracturados, cocinados y consumidos.
El fragmento facial humano descubierto en el yacimiento de la Sima del Elefante (Sierra de Atapuerca, Burgos) en 2022 y datado entre 1,1 y 1,4 millones de años constituye la cara más antigua conocida de Europa occidental.