El director general de Turismo, Francisco Martín Simón, y el presidente de la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (ADEAC), José Palacios Aguilar, han realizado la entrega del distintivo Bandera Azul a los alcaldes de Orellana la Vieja, Cayetano Ramos Sierra, y de Cheles, Antonio Sierra Serrano, en un acto celebrado este martes en Mérida.
La playa de interior de Orellana la Vieja, que fue la primera playa de interior de España en lograr este distintivo, ha conseguido revalidar su Bandera Azul, tras doce años consecutivos; cuenta con dos reconocimientos más: un Sendero Azul y una Bandera Azul en su Puerto Deportivo.
Por otro lado, la playa de Cheles, ‘La Dehesa’, en el embalse de Alqueva, ha revalidado este galardón por tercer año consecutivo. En Extremadura están dos de las nueve playas de agua dulce que existen en España.
El director general de Turismo ha puesto de relieve que, “en el Día Mundial de los Océanos, que se celebra hoy, queremos mandar un mensaje con motivo de la entrega de estas dos Banderas Azules: ‘Extremadura es agua’. Queremos posicionar la región como un destino de interior de agua dulce en el periodo estival. Animamos a los ayuntamientos que tienen zonas de baño en el registro NAYADe a que presenten candidaturas para obtener bandera azul en 2022-2023”.
Martín ha añadido que “Extremadura cuenta con 1.500 kilómetros de costa de agua dulce, lidera en España el número de Banderas Azules en playas de interior en distintos espacios de baño, queremos seguir siendo líderes, hay un compromiso fuerte de la Junta de Extremadura con la calidad del agua, para que la región sea reconocida a nivel nacional como una zona de interior donde pasar un día perfecto en nuestras playas fluviales, en nuestras playas de embalses o en nuestras zonas de baño naturales”.
Bandera Azul es un distintivo que otorga anualmente ADEAC, organismo acreditado por la FEE (Foundation for Environmental Education), a las playas y puertos que cumplen una serie de requisitos, que son revisados año tras año.
Este distintivo avala la calidad excelente de las aguas, una gestión ambiental adecuada, la seguridad de servicios e instalaciones y la realización de actividades de educación ambiental, que incluyen la disposición de paneles informativos en el entorno de la zona de baño, requisitos indispensables para su obtención.
