La reciente noticia sobre la aprobación del permiso de extracción denominado «Acebo» ha desatado una ola de protestas en los municipios de Acebo, Hoyos, Perales del Puerto y Villasbuenas de Gata, ubicados en la Sierra de Gata. Este permiso permitiría la extracción de recursos como litio, estaño, wolframio y tántalo en la región, afectando directamente a 65 cuadrículas mineras en la zona.
El alcalde de Acebo, Julián Puerto, expresó su preocupación ante esta decisión, recordando que en 2018 ya se había intentado reactivar la actividad minera en la región, pero gracias a la oposición local no se pudo concretar. Ahora, el alcalde espera que la historia se repita, ya que advierte sobre los potenciales daños al ecosistema y al turismo, pilares fundamentales de la economía local.
Por su parte, desde la plataforma en contra del proyecto, destacan los riesgos de impacto ambiental que conlleva esta actividad extractiva. Aunque el permiso de investigación se concede si se cumplen ciertos requisitos, el proceso de tramitación apenas está comenzando. Los municipios afectados disponen de un plazo de veinte días para presentar sus alegaciones y tratar de detener este proyecto que consideran perjudicial para la región.
Las protestas en Sierra de Gata reflejan la preocupación de los habitantes locales por la preservación de su entorno natural y el futuro de su principal fuente de ingresos: el turismo. Mientras tanto, esperan que las autoridades consideren seriamente las repercusiones de este proyecto minero antes de tomar decisiones que podrían alterar irreversiblemente el paisaje y la vida de la región.
En Acebo los vecinos han comenzado a colgar carteles en ventanas y balcones donde muestran su rechazo a la mina. Incluso este fin de semana se han recogido firmas en Moraleja aprovechando la celebración el mercadillo semañal de los sábado.
En la foto, cartel en señal de protesta.
