La Junta de Extremadura ha solicitado este miércoles al Gobierno que la comunidad autónoma pase a la fase 1 de transición hacia la normalidad el próximo lunes, día 11 de mayo, pero ha enviado al Gobierno dos informes distintos, uno por cada provincia.

El vicepresidente segundo y consejero de Sanidad y Servicios Sociales, Jose María Vergeles, ha informado esta tarde sobre la solicitud realizada por la Junta de Extremadura al Gobierno de España para el paso de las dos provincias extremeñas a la fase 1 del plan de desescalada.

La petición ha sido realizada tras la reunión que ha celebrado hoy la Comisión no permanente de la Asamblea de Extremadura con la participación de los distintos grupos con representación parlamentaria.

Vergeles ha indicado que Extremadura ha formulado su propuesta con la intención de que toda la región pueda avanzar a partir del proximo lunes, día 11 de mayo, hacia una nueva fase de lo que se ha dado en llamar desconfinamiento, aunque ha reconocido que "nos hemos registrado en el ámbito geográfico de la provincia y se ha enviado un informe" por cada una de ellas, Cáceres y Badajoz.

El consejero ha recordado las actividades que se podrán llevar a cabo a partir del lunes 11 de mayo si el Gobierno da una respuesta positiva, algo que se conocerá con toda probabilidad el viernes por la tarde y que será publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) del sábado.

La Junta analizará las exigencias de prevención de riesgos laborales que se producen en cada uno de los sectores afectados por el Covid-19 a partir del día 11 de mayo y Salud pública tendrá que ser informada de aquellos datos sospechosos de contagio que se produzcan para lograr su detección precozmente.

Vergeles también ha anunciado que en el caso de detectarse un caso sospechoso se realizará "la prueba patrón oro", que es la PCR y ha asegurado que el Gobierno regional está en disposición de poder realizar hasta 1.300 pruebas de este tipo diariamente. De este modo se podrá testar a todos los casos sospechosos que se puedan dar en el sistema así como a su red de contactos para intentar "yugular los brotes".

Las personas que den positivo irán a aislamiento domiciliario y en el caso de que no resulte posible se dispondrá de unas 21.000 plazas en ambas provincias para garantizar su confinamiento individual. En el caso de que el paciente reúna criterios de ingreso hospitalario o de cuidados intensivos se le ofrecerá una respuesta sanitaria acorde con sus circunstancias.

En este sentido, el consejero ha afirmado que la Junta de Extreamdura se encuentra en condiciones de alcanzar su máxima capacidad de camas hospitalarias y de UCIs en sólo tres días y la posiibilidad de contar con respiradores automáticos de forma instantánea.

La Junta de Extremadura está convencida de que la respuesta ministerial será positiva y que ambas provincias podrán avanzar hacia una nueva fase del desconfinamiento a partir del próximo lunes.