ISABEL BARRANTES 

 

La Guardia Civil ha detenido a dos hombres de 55 y 39 años, vecinos de Zarza de Granadilla y Plasencia, como supuestos autores de varios delitos de tenencia ilícita y tráfico de armas, a los que se les consiguió aprehender dos revólveres en perfecto estado y uno de ellos con munición. 

Durante el pasado día 9 de julio los agentes de la Guardia Civil del Puesto de Zarza de Granadilla culminaron una investigación contra el tráfico, tenencia y fabricación de armas que se inició en octubre de 2016, tras la detección de dos personas en el interior de un vehículo en la citada localidad, constándole a uno de ellos, antecedentes por tenencia y tráfico de armas.

Ante las sospechas que de se pudiera llevar a cabo algún intercambio o venta de armas, la Guardia Civil activó un dispositivo para la localización del vehículo, siendo detectado de nuevo en la localidad de Zarza de Granadilla.

Cabe destacar que la Guardia Civil se percató de la presencia de un conductor que realizó una maniobra extraña al observar su presencia. Tras la detención del vehículo, se procedió a la identificación de su ocupante así como al registro del mismo, siendo localizadas ocultas bajo un asiento, dos armas.

Se trataba de un revólver del calibre 6 milímetros y otro del calibre 5,75, el cual se encontraba con seis cartuchos. También se encontraron multitud de piezas de otras armas cortas de fuego, careciendo uno de los revólveres, de ningún tipo de  marca o numeración  que facilitara su identificación.

Con este motivo la Guardia Civil procedió a la detención del supuesto vendedor de las armas, que entregó de forma voluntaria diversas herramientas para la fabricación de piezas de armas, así como otras piezas de armas de una pistola de fogueo que habían sido transformadas para su uso en armas reales.

Igualmente, en el domicilio de uno de los detenidos, fueron intervenidos 8 gramos de pólvora, utensilios y herramientas para la fabricación artesanal de armas de fuego, moldes, cartuchos artesanales y un artilugio para la fabricación de silenciadores. 

Finalizada la investigación, la Guardia Civil pudo determinar la erradicación de un taller clandestino de fabricación de armas de forma ilícita, así como confirmar el supuesto delito de tráfico de armas al haberse realizado una transacción entre ambos detenidos.