ISABEL BARRANTES 

 

La Policía Nacional ha detenido a un varón como presunto autor de un delito de violencia doméstica al retener ilegalmente a su hija. Se trata de un hombre de nacionalidad marroquí que prohibió a su hija mantener cualquier tipo de contacto con otras personas durante cinco años. 

Los hechos tuvieron lugar el pasado día 9 en Almendralejo cuando el 091 recibió una llamada de una joven que manifestaba que su padre la había maltratado durante varios años y por ello había abandonado el domicilio familiar para refugiarse en casa de una amiga. 

Según informó la joven el padre se encontraba en esos momentos en el edificio amenazándola con llevársela a Marruecos si no regresaba a la casa.

Con este motivo la patrulla se personó en el lugar de la llamada encontrándose a un varón que al ser interrogado manifestó que su hija se había encerrado con una mujer que les estaba dando problemas “desde hace un montón de tiempo”. 

Una vez en la vivienda los agentes se entrevistaron con la joven de 20 años quien manifestó que había huido de su casa porque su padre la maltrataba desde hacía cinco años, encerrándola en su habitación, la cual tenía la ventana bloqueada desde aquel momento, y dejándola salir sólo en compañía de su madre.

La joven añadió que desde hacía cinco años no ha asistido al colegio y que durante todo el año 2014 no salió de la habitación "ni una sola vez", por lo que había tenido dos intentos de suicidio que le habían acarreado determinadas enfermedades.

Tras escuchar a la víctima, los agentes se entrevistaron igualmente con la madre de ésta, la cual corroboró todo lo manifestado por su hija, añadiendo que ella y sus otros dos hijos, de 6 y 8 años de edad, también eran sometidos a este aislamiento, teniendo prohibidos el uso del ordenador o visualizar la televisión, llegando incluso a quedar encerrados con llave en el domicilio familiar cuando su marido salía del mismo. 

Según han señalado desde la Policía Nacional, la inspección por parte de los policías del domicilio familiar les permitió comprobar cómo, efectivamente, la ventana de la habitación de la requirente contaba con una contraventana, bloqueada con unas bridas metálicas y otra de las habitaciones, donde estaba ubicado el ordenador, se encontraba cerrada con llave. 

Por todo ello, los agentes procedieron a la detención del referido varón, de 48 años de edad y sin antecedentes policiales, como presunto autor de un delito de violencia doméstica.