La delegada del Gobierno en Extremadura, Carmen Pereira, ha descartado el robo y el ajuste de cuentas como hipótesis de la muerte del empresario cacereño de Logrosán. Pereira hacía estas declaraciones esta mañana en Plasencia y ha confirmado que la muerte de Alfonso Triguero, de 52 años, se produjo por un disparo de un arma de fuego, propiedad del yerno de la víctima.

Pereira ha asegurado que está practicamente "descartado" que el robo sea el móvil de la muerte del empresario. También ha rechazado como hipótesis que la muerte del empresario, que recibió un disparo de madrugada mientras dormía en su casa, se haya producido por un ajuste de cuentas.