El Convento de Las Freylas de Mérida se destinará, en el 85 por ciento de su superficie, un total de 7.019 metros cuadrados, a espacio público y cultural; mientras que el 15 por ciento restante, 1.244 metros cuadrados, lo ocupará una hospedería con 51 habitaciones que servirá para financiar los servicios que se ofrezcan en la zona pública.

El arquitecto que ha elaborado el proyecto, Adolfo Pérez, indicó que gracias a esta actuación se podrán contratar como "mínimo" a 100 personas, más un "mínimo" de 45 trabajadores que se encargue de gestionar la hospedería.

   Además, el alcalde de Mérida, Ángel Calle, anunció que espera que las obras de rehabilitación del convento puedan empezar a lo largo del año 2010 y, según apuntó el arquitecto, el periodo de ejecución podría ser de "un poquito menos de tres años".

   Al respecto, el primer edil recordó que hay que hacer excavaciones arqueológicas y señaló que, según las previsiones de Adolfo Pérez, existe una parte del Convento de Las Freylas en la que se encontrarán restos de "muchísima importancia" como la Basílica Visigoda, casas romanas y ruinas de los siglos I y III antes de Cristo.

   Indicó también que puesto que las diferentes actuaciones que se van a realizar afectan a la Basílica de Santa Eulalia y al culto religioso a la patrona, el proyecto será presentado próximamente al arzobispo de Mérida-Badajoz, Santiago García Aracil, ya que el ayuntamiento "no" hará "nada sin el Nihil obstat del arzobispado".

   El alcalde de Mérida, Ángel Calle, explicó que se trata de un proyecto en el que "la mano del arquitecto se nota" pero "sin desvirtuar en absoluto el valor histórico", así como "arquitectónico, cultural y religioso" del Convento de las Freylas.

   El proyecto fue presentado hoy en rueda de prensa en la capital extremeña por el primer edil y por el artífice del mismo, el arquitecto Adolfo Pérez López, quien ganó el concurso de ideas convocado por la Consejería de Cultura y Turismo para este fin.

GESTIÓN PÚBLICA

   Calle señaló que pretende que la gestión de la parte cultural del proyecto sea pública y para ello "se buscará la figura jurídica que corresponda", ya sea una fundación, un patronato o un consorcio, que "pueda allegar fondos" tanto económicos como bibliográficos, y que se encargue de organizar eventos en dicho espacio.

   Asimismo, indicó que una vez licitada la obra, la empresa adjudicataria será la encargada de "financiar todo" ya que en un pliego de condiciones se establecerá que "quien construya" tendrá "la obligación" de gestionar la hospedería durante un periodo de tiempo determinado, así como rehabilitar el espacio público.

   El alcalde de Mérida destacó también que esta obra tiene una "enorme importancia" para la ciudad porque "no es una rehabilitación cualquiera". "Es una obra para las generaciones futuras", y añadió, "que van a tener, en torno a la figura de Santa Eulalia, una hospedería de nivel" y un espacio cultural público.

   Igualmente, el proyecto también fue presentado hoy a la Asociación de Santa Eulalia, al párroco de Santa Eulalia, al vicario episcopal, al Instituto de la Arqueología de Mérida y a la Federación de Asociaciones de Vecinos de la ciudad, "con el compromiso de que ellos se van a convertir en comisión para la elaboración de sugerencias" al proyecto con el fin de enriquecerlo.

   Ángel Calle recordó que la superficie en la que se desarrollará el proyecto cuenta con 8.000 metros cuadrados más que pertenecían a la empresa Maderas Moreno y cuyo dueño aceptó una permuta de terreno con el ayuntamiento, por lo que el espacio que ocupará la actuación "llega hasta la estación de ferrocarril", subrayó.

   En cuanto al presupuesto, el alcalde no quiso adelantar una cifra exacta, aunque Adolfo Pérez señaló que "únicamente" la rehabilitación del convento podría tener un coste de unos 1.200 euros por metro cuadrado, "si todo va bien", sin contar las excavaciones y el resto del terreno. Además, indicó la restauración del convento e "incluso la hospedería" podrían estar en "un año y medio".

REORGANIZAR EL ESPACIO

   En cuanto al desarrollo del proyecto, el arquitecto explicó que la idea es reorganizar los distintos elementos que componen la superficie total, la Iglesia de Santa Eulalia, el Hornito, el Convento de Las Freylas, el claustro del siglo XVI, los espacios "perdidos" del convento y los huertos, así como los diferentes accesos, y generar un "espacio único" mediante un "gesto arquitectónico sencillo" que consiste en hacer un "plegamiento" de la "alfombra de granito" del convento.

   En concreto, señaló que se utiliza el muro de piedra del patio de los naranjos como elemento "continuador" hasta el espacio público. Además, según apunta el dossier del proyecto, la nave occidental de la torre se unificará con un solo piano de cubierta inclinado y la torre se ampliará conformando un "cuerpo mirador".

   Además, indicó que el espacio público envolverá a la iglesia y al convento y ofrecerá la posibilidad de darle usos creativos, expositivos y culturales.

   Asimismo, Pérez destacó que pretende recuperar el edificio original del siglo XVI con los mismos materiales que se utilizaron en la primitiva construcción y que pueda ser percibida como una arquitectura de su tiempo en el siglo XXI.

   Por tanto, los materiales utilizados en la rehabilitación serán granito del convento, mortero de cal y, para la carpintería, hierro oxidado.