La temporada de baño en Villanueva de la Vera ha comenzado con mayor seguridad, tanto para peatones como ciclistas, así como con mayor comodidad para los automóviles que circulan por la carretera EX-203 tras la construcción por parte de la Diputación de Cáceres de un carril bici y peatonal.

El presidente de la institución provincial, Carlos Carlos, ha visitado este lunes la localidad, donde, acompañado de su alcalde, Antonio Caperote, ha comprobado de primera mano el resultado de la primera fase de esta actuación, financiada en su totalidad por las arcas provinciales a través del programa «Diputación Desarrolla».

El segundo tramo del carril, actualmente en ejecución, contará con fondos del Plan Activa, también de la Diputación, con lo que la inversión total ascenderá a unos 140.000 euros.

Las obras del primer tramo se pudieron terminar durante el estado de alarma, pero es este verano cuando realmente se ha comprobado su efectividad y la seguridad que aporta a los habitantes y a los visitantes durante la temporada de baño.

El carril facilita el acceso de peatones y ciclistas al conocido como Parque del Diablo, que se encuentra en el entorno de la piscina municipal, y a la Cascada del Diablo, una zona de alta intensidad de circulación, «especialmente durante la temporada de baño», tal como ha indicado el alcalde.

Además, al estar la piscina «encajonada entre las dos laderas» a veces se tienen problemas de aparcamiento, pero esta obra ayuda a que «los jóvenes, sobre todo, vengan andando o en bicicleta, por lo que quita prácticamente el 50 % de los usuarios en coche», ha añadido.

Estas obras han supuesto la construcción de un carril bici y peatonal desde la salida de Villanueva de la Vera, dirección Madrigal de la Vera, un carril de hormigón pigmentado en color verde, que se ha separado de la carretera regional EX-203, junto a la cual discurre en paralelo, por una doble barrera metálica de protección.

En total, una vez que se concluya el tramo que está en ejecución, el carril bici y peatonal tendrá una extensión aproximada de 900 metros.

Carlos Carlos se ha acercado también a la zona de baño para conocer su estado y ha recordado el compromiso de la Diputación de Cáceres de coordinar técnica y económicamente las intervenciones necesarias en todas las zonas de baño del norte de la provincia, de modo que se cumpla con la normativa.

El objetivo es «terminar con la incertidumbre que tienen cada año los alcaldes y alcaldesas de poder o no abrir, y dar la seguridad jurídica necesaria».

Ha destacado que en el último pleno la Diputación aprobó una partida de 500.000 euros para este año, de modo que se puedan iniciar los trabajos de acondicionamiento, tal y como planteó la institución provincial a la Confederación Hidrográfica del Tajo en su última reunión.

En este sentido, ha reconocido que esta cantidad «no soluciona el problema de todas las zonas que lo necesitan y que según el listado que les ha pasado la CHT son 72, pero es «el arranque y la muestra de que la Diputación tiene un compromiso serio para la solución de este problema».