La Unión Extremadura ha advertido este martes de que con la reforma laboral, que ha entrado en vigor el 1 de abril, muchos pequeños empresarios van a optar por cambiar a cultivos mecanizados por no poder cumplir las normas aprobadas, «con el consiguiente aumento del paro».

La organización ha explicado que, en el sector agrario, la principal novedad es la eliminación de los contratos por obra y servicio, que eran los utilizados en su mayoría para las labores en el campo y en especial para las tarea de poda y recolección.

A partir de ahora, para estas labores temporales, los agricultores y ganaderos deberán utilizar, por defecto, la contratación como fijo discontinuo a todos los obreros que necesiten aunque el periodo de trabajo sea en un corto espacio de tiempo.

Ello supone unos «inconvenientes importantes» según La Unión, dado que en el sector agrario las principales necesidades de mano de obra son temporales y de escasa duración y debido a que la mayor parte de las explotaciones son familiares.

En una nota, ha advertido de que la situación se agrava con la idiosincrasia de los trabajadores contratados, muchos de ellos rumanos y magrebíes, con domicilio ambulante y con dificultad de contactar con ellos en campañas sucesivas para darles prioridad a la hora de la contratación, «ya que si no se realiza esta comunicación por escrito y de forma fehaciente se considerará como despido improcedente».

La Unión ha afirmado que no está en contra de la estabilidad en el empleo, pero ha considerado que no se puede hacer fijos, aunque sean discontinuos, a trabajadores que van cinco días a la recolección o a la poda.

Por ello ha remitido un comunicado urgente a la Delegación del Gobierno en la que informa de que la actual norma no se puede aplicar en el sector agrario y que «tiene más lagunas que certezas», y en la que solicita un aplazamiento en su entrada en vigor hasta que se analicen con criterio técnico la mediadas aprobadas «y que no se pueden aplicar».

«Si el Ministerio de Trabajo siguiera obligando con sanciones a aplicar una norma inaplicable en el sector agrario lo único que va a conseguir es que muchos pequeños empresarios renuncien a explotar cultivos sociales y nos vayamos a cultivos mecanizados sin uso de mano de obra, aumentando el paro en Extremadura», ha apuntado.

Ha añadido además que no entiende que organizaciones agrarias como UPA, federada a UGT, y Asaja, afiliada a la CEOE, hayan pactado esta reforma «que tanto perjudica al sector agrario».