El socialista Ismael Bravo se ha despedido de sus vecinos a través de un escrito en el que asegura que continuará trabajando desde la oposición y ha aconsejado a su sucesor en el cargo que vele por el interés de los vecinos.

A pocas horas de la celebración del pleno de investidura, Bravo ha agradecido el apoyo de todos los que le prestaron su confianza y asegura que ha intentado cumplir «con dignidad y respeto» hacia Talayuela.

«Me voy con la serenidad y la tranquilidad de haber dado lo mejor de mí, de haber hecho todo lo que estaba en mi mano para ayudar a mis vecinos, y convencido de que estos cuatro años han sido un resurgir para Talayuela, Santa María y Barquilla, habiendo conseguido mejorar nuestras infraestructuras, sanear con creces las arcas municipales, fomentar la economía local e incluso atraer nuevas empresas nacionales», ha explicado el todavía alcalde en funciones, quien ha dicho que lo más relevante de esta legislatura ha sido el cariño de los vecinos, su apoyo y su saludo por la calle.

Ismael Bravo ha agradecido la labor de los trabajadores del ayuntamiento, ha dado las gracias a su familia y ha presentado sus disculpas por los errores que pudiera haber cometido durante su etapa de alcalde.

«Ahora, soy 4 años más viejo, y si me lo permitís, un poquito más sabio en mi experiencia como alcalde, por eso, y aunque no me lo hayan pedido, les voy a dar un humilde consejo a mis sucesores en la gestión de nuestro municipio: para que un pueblo progrese, no deben primar intereses individuales ni doctrinas de partido, siempre debemos velar por el interés de los vecinos”, ha dicho textualmente.

En su escrito de despedida, Bravo garantiza que el equipo con el que concurrió a las elecciones municipales del pasado 28 de mayo trabajará desde la oposición, «por y para el bien del municipio» y concluye asegurando que nunca podrá agradecer a los vecinos que le hayan permitido ser su alcalde.