Este sábado se han constituido los ayuntamientos de Extremadura con numerosos cambios de cara a la legislatura que ahora comienza y que se prolongará durante los cuatro próximos años.

Las principales ciudades de la comunidad autónoma, Badajoz, Cáceres, Mérida, Plasencia y Don Benito, han sufrido una suerte desigual. En Badajoz no habrá cambio y continuará siendo alcalde el popular Ignacio Gragera, que ya había desempeñado este puesto durante los dos últimos años de la legislatura anterior tras el acuerdo alcanzado con el Partido Popular para constituir una alternancia en el poder de dos años cada uno.

En Mérida también corren aires continuistas y ni las supuestas acusaciones de corrupción lanzadas contra Antonio Rodríguez Osuna por la campaña de promoción de los carnavales, ni los controvertidos audios que fueron filtrados a través de las redes sociales, han impedido que el socialista obtenga una cómoda mayoría absoluta para continuar con el bastón de mando.

En Cáceres, Rafael Mateos, del Partido Popular (PP), toma el relevo a Luis Salaya y gobernará en minoría sin que Vox entre en el gobierno municipal. Mateos ha apartado al socialista Luis Salaya de la alcaldía, que también anunció que se retiraba de la voda política tras la derrota electoral del pasado 28 de mayo.

El alcalde saliente, Luis Salaya, entregó el bastón de mando al nuevo alcalde del Partido Popular, Rafael Mateos, que gobernará los cuatro años con 11 concejales y que necesitará apoyos puntuales para sacar adelante algunos asuntos destacados como los presupuestos municipales.

En Plasencia, el popular Fernando Pizarro logra una nueva mayoría absoluta que le permite gobernar cómodamente con una oposición que no logra despeguar. Pizarro, que estuvo a punto de convertirse en el candidato del PP a la presidencia de la Junta de Extremadura y terminó renunciando a ese puesto, gobernará cómodamente en la ciudad del Jerte con un equipo ya consolidado.

La principal sorpresa de las grandes ciudades se ha producido en Don Benito, donde María Fernanda Sánchez, de Siempre Don Benito, será la alcaldesa durante los dos próximos años después de que finalmente se haya aceptado la propuesta de alternarse en la alcaldía con el Partido Popular, dividiendo la legislatura en dos partes: de 2023 a 2025 y de 2025 a 2027.

María Fernanda Sánchez hubo de salir acompañada por la policía entre los gritos que preferían algunas personas concentradas que se encuentran a favor de la fusión de Don Benito con Villanueva de la Serena, y donde también se escucharon los aplausos de los simpatizantes de esta nueva formación que ha roto el tablero político en las Vegas Altas.

El Teatro Imperial de Don Benito fue el lugar elegido para la toma de posesión de los concejales de la nueva corporación y la sesión plenaria comenzó con retraso debido al cruce de cánticos en contra y a favor de la fusión de esta ciudad con Villanueva de la Serena.

En Trujillo, Inés Rubio devolvió la alcaldía al Partido Popular (PP) tras el varapalo sufrido por los socialistas de José Antonio Redondo, que se quedan en la oposición después de haber estado al frente del ayuntamiento durante los últimos cuatro años.