Una de cada cuatro personas nacidas y residentes en la actualidad en España, exactamente el 25,10 %, algo más de 10 millones, viven en una comunidad distinta a la suya, una proporción que es mayor en regiones como Extremadura, donde sube hasta el 36,41 %, sin contar los que han emigrado al extranjero.

El 35,02 % alcanza a los naturales de Castilla-La Mancha y el 33,71 % a los originarios de Castilla y León.

De acuerdo a la última revisión de la estadística del padrón continuo del Instituto Nacional de Estadística (INE), a 1 de enero de 2022, estos porcentajes son aún más altos para los nacidos en Melilla (43,93 %) y en Ceuta (36,99 %).

Por el contrario, las autonomías en las que siguen viviendo más personas nacidas en ellas son Canarias (95,84 %), la Comunidad Valenciana (92,70 %), Cataluña (91,99 %), Baleares (91,52 %), Galicia (87,60 %) y Murcia (86,93 %).

Además de estas seis, los territorios en los que una mayor proporción de sus naturales permanece allí son Navarra (84,46 %), Andalucía (84,27 %), País Vasco (84,24 %), Madrid (83,92 %), Asturias (83,77 %), Cantabria (82,86 %), Aragón (81,09 %) y La Rioja (77,18 %).

LA MIGRACIÓN INTERIOR MULTIPLICA POR 12 A LA EXTERIOR

Estas cifras ponen de manifiesto la importancia de la emigración interior en comparación con la de españoles hacia exterior, ya que en conjunto son 853.779 personas nacidas en España -también según datos del INE a 1 de enero de 2022, en este caso del análisis de la Población española residente en el extranjero- las que viven en otros países, casi 12 veces menos.

De estos, seis de cada diez son originarios de solo cuatro comunidades: Galicia (146.423, el 17,15 % del total), Cataluña (126.296, el 14,79 %), Madrid (120.794, el 14,15 %) y Andalucía (117.251, el 13,73 %).

A continuación figuran en este listado Castilla y León (61.962, el 7,26 %), la Comunidad Valenciana (54.970, el 6,44 %), Canarias (36.837, el 4,31 %), País Vasco (36.524, el 4,28 %), Asturias (31.741, el 3,72 %), Castilla-La Mancha (21.826, el 2,56 %), Aragón (19.619, el 2,30 %) y Murcia (19.032, el 2,23 %).

Menos del 2 % del total de nacidos en España que han marchado a otros países representan Extremadura (16.563, el 1,94 %), Baleares (11.565, el 1,35 %), Cantabria (10.699, el 1,25 %), Navarra (10.450, el 1,22 %), La Rioja (5.034, el 0,59 %), Melilla (4.162, el 0,49 %) y Ceuta (2.031, el 0,24 %).

EN BALARES Y MADRID, CASI LA MITAD SON FORANEOS

Los datos del INE permiten conocer también dónde han nacido los residentes en cada comunidad, y en esta estadística sobresalen Extremadura, Galicia y Andalucía como las regiones con mayor proporción de habitantes autóctonos, con un 85,02, un 84,54 y un 82,67 %, respectivamente.

En el lado opuesto figuran Baleares y Madrid, donde solo el 54,00 % y el 56,09 % de sus habitantes, respectivamente, han nacido allí, y en menor medida la Comunidad Valenciana (65,77 %), La Rioja (64,63 %) y Cataluña (63,69 %).

Entre ambos extremos oscilan las restantes nueve autonomías: Castilla y León (79,89 %), Asturias (78,78 %), Cantabria (72,99 %), Murcia (72,46 %), País Vasco (71,27 %), Canarias (71,02 %), Aragón (70,70 %), Castilla-La Mancha (68,65 %) y Navarra (67,51 %).

Los flujos de migración interior han provocado que, por ejemplo, el 15,75 % de las personas nacidas en Castilla-La Mancha, el 13,16 % en Extremadura y el 12,84 en Castilla y León residen actualmente en Madrid.

Lo mismo ocurre en Cataluña, donde se han trasladado el 7,55 % de los nacidos en Extremadura, el 7,35 % en Aragón y el 6,14 % en Andalucía; o en la Comunidad Valenciana, que acoge ahora al 9,00 % de los naturales de Extremadura.

Traducido a población, estos movimientos internos suponen que más de medio millón de andaluces de nacimiento (511.847) viven en Cataluña, además de otro cuarto de millón (250.454) que residen en Madrid.

En esta comunidad viven también 366.816 castellanoleoneses, 341.502 castellanomanchegos y 185.468 extremeños y en Cataluña 107.832 castellanoleoneses, 106.462 extremeños, 84.952 aragoneses y 82.528 castellanomanchegos.

En algunos casos, el intercambio de población entre comunidades es de ida y vuelta, como ocurre con las 236.097 personas nacidas en Madrid que ahora residen en Castilla-La Mancha.

MOTIVOS LABORALES Y PROXIMIDAD GEOGRÁFICA

Adolfo Maza, profesor en el Departamento de Economía de la Universidad de Cantabria, ha dicho en declaraciones a Efe que Madrid es el primer destino desde casi todas las provincias, incluidas algunas del norte y el sur, y también Cataluña, especialmente Barcelona, sobre todo de provincias cercanas, y las comunidades insulares, en este caso por motivos no laborales.

En el conjunto del país, los motivos laborales sí son la principal razón de la emigración, aunque hay otros factores, como el precio de la vivienda, detrás de traslados de residencia sobre todo desde las grandes ciudades a zonas limítrofes más asequibles en otras provincias, en un fenómeno que, a falta de datos que lo contrasten, puede haber influido el auge del teletrabajo a causa de la pandemia de covid-19, como ha indicado Maza.

Como en este tipo de migración, el también vocal de la Asociación Española de Ciencia Regional y presidente de la Asociación Cántabra ha señalado que «la distancia influye mucho» y, con la salvedad ya comentada de Madrid, «las migraciones son mayoritariamente a provincias limítrofes».