Más de doscientos técnicos de ambulancias se han concentrado este martes en Mérida, frente a la casa presidencial de la Junta de Extremadura, para denunciar «recortes» en el servicio del transporte sanitario en zonas rurales e instar al Ejecutivo a incluir en el pliego de licitación seis unidades de soporte vital básico y urgencias parciales.

Se han concentrado también para exigir que en el traslado sanitario en estas zonas rurales, además de un conductor, participe también un técnico sanitario a fin de «garantizar una atención sanitaria básica para que se produzca la llegada al hospital en las mejores condiciones», según ha informado el portavoz de la plataforma de técnicos de transporte sanitario, José Miguel Rubio.

Ha señalado que los «recortes» incluidos en el pliego del transporte sanitario terrestre para el periodo 2022-2026 consisten en la eliminación de un técnico para crear una unidad no asistencial con material que existe, a día de hoy, en las ambulancias asistenciales.

Asimismo, Rubio ha recordado el caso de una unidad no asistencial en Galicia con un solo técnico y que en la que falleció un persona durante el traslado al hospital, «justamente lo que nosotros queremos evitar».

En cuanto a las horas de trabajo, ha reivindicado que actualmente los técnicos están «sobrepasando» el cupo anual, por lo que ha propuesto que las guardias de emergencia y soportes pasen de un día trabajado y dos librados, a uno y tres, respectivamente, «como está en el resto de España».

«Seguiremos luchando por un trasporte sanitario digno que es lo que Extremadura se merece», ha concluido.

A la protesta ha asistido la secretaria general de Podemos Extremadura, Irene de Miguel, y la portavoz del grupo parlamentario PP, Cristina Teniente, quien ha exigido la retirada del un pliego que «recorta sobre lo recortado» y «desmantela» el transporte sanitario en el entorno rural.