Siete de cada diez productores asegurados de cereza en Cáceres ha registrado siniestros, principalmente rajado, debido a las fuertes lluvias registradas en los últimos días en la provincia, tal y como ha informado Agroseguro.

Los trabajos de peritación ya ha comenzado e indican que las lluvias han afectado especialmente las variedades Lapins (con daños medio-altos) y Ambrunés (que podría presentar, además, problemas futuros de manchado). Todos estos riesgos cuentan con la cobertura del sistema español de Seguros Agrarios Combinados.

Agroseguro ha recibido partes de siniestros de más de 2.000 parcelas correspondientes a un total de 212 agricultores asegurados, el 69% del total de los productores de cereza asegurados en la provincia de Cáceres.

La estimación de indemnizaciones provocadas por los fuertes chubascos de la última semana supera los 2 millones de euros (por daños en 2,5 millones de kilos asegurados), lo que se puede traducir en una media de indemnización de 0,80€ por cada kilogramo de producción de cereza asegurada en las parcelas siniestradas, seis veces más que el coste medio que supone para el productor la prima del seguro. En concreto, el coste medio para el agricultor del seguro de cereza en Extremadura –en 2021- se situó en torno a los 0,13 euros por kilogramo asegurado.

Si se confirma este importe, se alcanzaría -en apenas diez días- la misma cifra registrada en todo el año pasado, cuando las indemnizaciones abonadas a los productores asegurados de cereza se situaron en los 2,4 millones, principalmente por lluvia y pedrisco.

En total, el 90% de los productores asegurados en Extremadura sufrió siniestro en 2020, y en concreto, la lluvia provocó un daño medio del 28,6% de la cosecha. De hecho, las tormentas de lluvia provocan –uno de cada cuatro años- la perdida de hasta un tercio de la cosecha de cereza cacereña.