Agentes de la Guardia Civil han detenido once personas e instruido diligencias a otras dos, todas ellas asentadas en la localidad pacense de Fuente de Cantos, y acusada de regentar tres puntos de venta de drogas en el municipio.
La Guardia Civil considera que los detenidos conformaban un grupo delictivo organizado dedicado a recepcionar, almacenar y vender la droga desde tres viviendas situadas en Fuente de Cantos.
Este es el resultado de la Operación ‘Freskoa’ que se inició el pasado mes de octubre, cuando la Guardia Civil logró una serie de indicios para determinar la implicación de un grupo delictivo, formado por una decena de personas, todas ellas asentadas actualmente en Fuente de Cantos, quienes se estarían dedicando al tráfico y venta de sustancias estupefacientes.
Se trata de un clan familiar del que su cabecilla organizaba y utilizaba tres viviendas ubicados en la misma calle del municipio para recepcionar, almacenar y vender la droga, y a los que acudían consumidores de la comarca y de localidades sevillanas limítrofes a comprar droga, según relata la Guardia Civil en nota de prensa.
Con las pruebas incriminatorias de la acción delictiva, este pasado viernes y coordinados por Juzgados de Instrucción de Zafra, se llevaron a cabo los registros de los tres domicilios y un garaje, por más de una treintena agentes de la Guardia Civil pertenecientes a las Unidades de Seguridad Ciudadana de Badajoz y Cáceres, con el apoyo de perros adiestrados en búsqueda de sustancias estupefacientes.
Unos registros en los que entre otros objetos se intervinieron casi un centenar de papelinas de cocaína y heroína preparadas para su venta, una pistola simulada, siete vehículos, una motocicleta y teléfonos móviles utilizados por el grupo.
Con esta actuación, la Guardia Civil considera desmantelado un grupo organizado de delincuentes en un clan familiar, así como tres puntos de venta de sustancias estupefacientes en la comarca
Las diligencias junto con los detenidos han sido puestas a disposición del Juzgado de Instrucción de de Zafra quien decretó el ingreso en prisión de la «cabecilla» del grupo y libertad bajo fianza de otros siete.
