El Consejo de Gobierno de la Junta de Extremadura, en reunión extraordinaria celebrada este sábado de manera telemática, ha adoptado medidas excepcionales en materia de salud pública para la ciudad de Badajoz, que retrocede a la fase 2 de la desescalada con la finalidad de frenar la transmisión del Covid-19.

Las medidas afectan fundamentalmente a los aforos en reuniones, eventos, hostelería, o actos culturales, según ha anunciado el vicepresidente segundo y consejero de Sanidad y Servicios Sociales, José María Vergeles, en una comparecencia de prensa al término de la reunión, acompañado por el alcalde de Badajoz, Francisco Javier Fragoso.

Vergeles ha justificado la medida indicando que no se trata de un cambio de fase, sino de controlar los aforos con la menor repercusión posible sobre el sector productivo de la ciudad. Pero en realidad es un retroceso para la ciudad, aunque no afecte a la movilidad ni a la esfera educativa o universitaria.

La decisión ha surgido tras el análisis de la incidencia acumulada del coronavirus durante los últimos 14 días en la ciudad de Badajoz. A diferencia de lo que sucedió durante la primera oleada de la Covid-19, en la que Cáceres superó todos los registros regionales, en esta ocasión la capital pacense acumula 269 casos por cada 100.000 habitantes y supera la media de Extremadura, que se sitúa en 255.

Vergeles ha desglosado los casos acumulados por zonas de salud de la capital pacense. Así, la zona de mayor incidencia es Cerro Gordo, con 521 casos de media por cada 100.000 habitantes. Le siguen la zona centro, con 388; La Paz, con 250; San Fernando, con 235; Suerte de Saavedra, con 225; Ciudad Jardín, con 224 y Valdespaillas, que tiene 223 casos por cada 100.000 habitantes.

Las zonas de menor incidencia son San Roque (192 casos por cada 100.00 habitantes) y El Progreso (158). Lo más preocupantes es que en los últimos días los nuevos contagios se están repartiendo por todas las zonas de la ciudad y estas medidas están destinadas a doblegar la curva creciente de incidencias.

El consejero ha advertido que se trata de evitar una transmisión comunitaria descontrolada y ese es el motivo fundamental de que se hayan adoptado estas medidas excepcionales cuando la situación aún está controlada y se pueden acotar los brotes que se están produciendo.

Según los datos de este sábado, Badajoz tiene 2.112 personas que se encuentran en seguimiento y a 952 se les realiza un control de una forma más estrecha.  Hay 549 personas que han dado una PCR positiva y el resto son contactos de casos. Vergeles ha reconocido que el trabajo de la Atención Primaria es intenso y de hecho este sábado estaba previsto hacer 400 pruebas PCR para acotar los brotes. Sin embargo el número de positivos ha aconsejado poner en marcha medidas excepcionales en materia de salud pública.

Con esta nueva situación, que se prolongará durante 14 días, las reducciones de aforo serán más limitadas. Así, no podrán celebrarse reuniones superiores a 10 personas; los velatorios al aire libre serán de 25 personas y en espacios cerrados  de 15 y los lugares de culto tendrán un aforo del 50% de su capacidad. Del mismo modo en bodas, bautizos, comuniones y otras celebraciones, el aforo de los locales será del 50% y no se permitirán más de 100 personas al aire libre o 50 en espacios cerrados.

Por lo que respecta a los locales comerciales, el aforo en su interior será menor del 40%, y las zonas comunes de los centros comerciales no podrán superar el 30% de su aforo. Los mercadillos verán reducido su aforo al 30% y en la hostelería y restauración no se podrá consumir en barra, sino en mesas, con aforos de un 40%  en el interior y un 45% en las terrazas.

Las bibliotecas, teatros, cines o auditorios no podrán superar un tercio de su aforo y las reuniones de negocios quedan limitadas al 50% del aforo del local donde se realicen. Se trata de medidas que, sin afectar a la movilidad de la población, tienen una fuerte repercusión sobre determinados sectores.

Vergeles ha querido transmitir tranquilidad al indicar que en Badajoz se trabaja “ejemplarmente entre la Administración local y regional» y ha solicitado a la sociedad que durante 14 días respete estas medidas para que la ciudad pueda vivir dentro de la nueva normalidad.