APAG Extremadura Asaja ha considerado “lamentable” la situación de indefensión en la que se encuentran los viticultores extremeños, que han iniciado la campaña percibiendo un precio un 25% inferior al que se pagaba en la anterior campaña a pesar de que la producción ha bajado con respecto al año pasado.

Así, las primeras contrataciones de uva para cava se están pagando a 0,23 euros por kilo, lo que equivale a unas pérdidas de 600 euros por hectárea.

A esto se suma «algo aún más grave», según la asociación, como es el hecho de que a pesar de que ya se ha iniciado la vendimia para el resto de variedades ni siquiera haya un precio establecido.

El presidente de la organización agraria, Juan Metidieri, destaca que “se repite la situación, con unos precios de miseria que ni siquiera cubren los costes de producción. Esto confirma, una vez más, que la ley de la cadena alimentaria, que fue modificada en el mes de febrero, continúa siendo ineficaz”.

Ante esta situación APAG Extremadura Asaja ha reclamado la implicación de la administración regional y de la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA) para que no se firmen contratos por debajo del coste de producción establecido en otras comunidades mientras “seguimos a la espera de que se lleven a cabo los estudios de costes de producción en Extremadura”.

Metidieri ha insistido en que “no se puede vender por debajo de los costes de producción”, y pide a los responsables políticos “que se tomen medidas reales y eficaces, que se hable menos de lo que se quiere hacer y que de una vez por todas se solucione la crisis endémica de los bajos precios de nuestro campo”.