Durante la crisis sanitaria generada por el coronavirus ha surgido un nuevo concepto, los rastreadores de la salud. Se trata de personal sanitario formado por veterinarios, farmacéuticos y médicos que estudian qué hicieron los pacientes contagiados las 48 horas antes de comenzar a notar los primeros síntomas del virus.

Extremadura está compuesta por una red de 147 sanitarios repartidos por toda la región, el área de salud de Coria cuenta con más de una veintena de sanitarios que realizan estas labores. Concretamente esta zona sanitaria cuenta con 12 veterinarios de Atención Primaria y 10 farmacéuticos que realizan estas labores. Asimismo, estos trabajos están apoyados por médicos, enfermeros y técnicos con el objetivo de detectar brotes de coronavirus y evitar su expansión con la mayor rapidez posible.

El director de salud del área de Coria, Gabriel Sancho, ha asegurado que la principal labor de estos sanitarios es buscar líneas de contacto para frenar el virus. Asimismo, ha aseverado que “el paciente tiene la obligación de colaborar y aportar toda la información posible para paliar los efectos del virus y evitar un brote”.

Una vez se conoce el resultado de la prueba PCR los investigadores comienzan a trabajar para evitar un brote de coronavirus. El médico da el aviso al paciente si es positivo y los veterinarios y farmacéuticos comienzan a recopilar información.

El contacto estrecho del positivo deberá guardar 14 días de aislamiento social como medida preventiva. Continuarán trabajando veterinarios y farmacéuticos diariamente para conocer la evolución del aislado; si presenta síntomas o si ha comenzado a incubar el virus.

En caso de que uno de los contactos estrechos resulte positivo por coronavirus se convierte en un nuevo caso. Las labores de estos sanitarios vuelven a reactivarse y comienza nuevamente el círculo.