Los vecinos y visitantes que lleguen este verano a Cilleros no podrán disfrutar de las piscinas municipales después de que el consistorio haya adoptado la decisión de no abrir este espacio de ocio porque no se puede garantizar la salud de los usuarios ni tampoco la de los trabajadores.
A pesar de que el ayuntamiento ha trabajado en la puesta a punto de estas instalaciones y ha tenido reuniones de trabajo con profesionales sanitarios, la decisión final ha sido no proceder a la apertura de este recurso.
El alcalde, Félix Ezcáy, ha explicado que en la población hay más de 470 personas mayores 65 años de edad y son "470 razones más que suficientes para tomar esta decisión".
Ezcáy ha manifestado entender que haya personas a las que no les guste esta decisión "sobre todo al empresarial y compartimos su malestar, sus miedos e inquietudes pero nuestra decisión es firme".
El alcalde ha explicado públicamente que es a los ayuntamientos a los que les corresponde velar por la seguridad de los ciudadanos y ha hecho alusión a la carta remitida por la Delegación del Gobierno en la que figura que "la actual situación no exime a los poderes públicos de su deber de organizar y tutelar la salud pública a través de medidas preventivas".
El primer edil de Cilleros asegura que a medida que avance el verano "aumentarán los puntos de riesgo y se deberán extremar más las precauciones y lo que no puede hacer el ayuntamiento es abrir más focos de contagio. La salud de todos deber ser lo prioritario en estos momentos" concluyó.
Esta medida se suma a la decisión de la Mancomunidad de Municipios de Sierra de Gata de no proceder a la apertura de las piscinas naturales de esta comarca, una medida que sigue generando numerosas protestas entre los representantes del sector turístico y emprearial de esta zona norte de la provicia de Cáceres.
