La Junta de Extremadura remitirá al Gobierno a partir de mañana un informe de indicadores y capacidades para solicitar el pase de las dos provincias a la fase 1 del plan para la transición hacia la normalidad que permitiría abrir terrazas, comercios y establecimientos de hostelería.

El vicepresidente segundo y consejero de Sanidad y Bienestar Social de la Junta de Extremadura, José María Vergeles, ha informado en su última comparecencia que el informe de indicadores y capacidades se enviará a partir de la próxima semana, que comienza mañana.

Cabe recordar que las dos provincias extremeñas aún se encuentran en la fase preparatoria o fase 0, que permite que los menores salgan una hora a la calle y los adultos a hacer ejercicio. Además esta fase inicial tiene permitida la apertura de locales y establecimientos con cita previa para la atención individual de los clientes, así como de los restaurantes con servicio de comida para llevar, sin consumo en el local. Por lo que respecta a los deportistas profesionales y federados, la fase en la que nos encontramos permite que puedan entrenar de forma individual.

Sin embargo Extremadura quiere pasar a la fase uno o inicial, que contempla la apertura del comercio bajo condiciones estrictas de seguridad, excepto los centros comerciales, donde son más probables las aglomeraciones.

En el caso de ser aprobada la petición de Extremadura, en restauración se podrán abrir terrazas con limitaciones de ocupación del 50%, así como en hostelería, hoteles y alojamientos turísticos, excluyendo las zonas comunes. Las terrazas podrán ocupar la mitad de su aforo después de que el Gobierno haya decidido rectificar la medida inicial, que limitaba la ocupación máxima al 30%.

La fase 1 también establece que el sector agroalimentario pueda reanudar las actividades que mantenía con restricciones, mientras que los lugares de culto podrán abrir limitando su aforo a un tercio de su capacidad.

En el ámbito deportivo, la fase 1 permitiría a los residentes en las provincias de Cáceres y Badajoz a la apertura de centros de alto rendimiento con medidas de higiene y protección reforzadas y el permiso para el entrenamiento medio en ligas profesionales. Para los ciudadanos que utilizan el transporte público, el uso de la mascarilla que antes estaba "altamente recomendado" ha pasado a ser obligatorio.

Vergeles ha indicado que hablar de desescalada puede “hacernos olvidar” que todavía estamos combatiendo el virus y ha advertido que "debemos instalar esto en el imaginario colectivo de nuestra sociedad" y no perder ni el miedo ni el respeto al virus para poder afrontar bien las fases de desescalada.

Para poder llevar a cabo las distintas fases en las que se ha dividido el desconfinamiento de la población, el consejero extremeño ha señalado que Extremadura debe construir un cuadro de mando con los indicadores de contagios para que nos prevengan de si se va a producir un brote o no.

Este órgano también vigilará los parámetros que midan las capacidades para saber si la región está preparada sanitariamente y otro cuadro informará de los indicadores que se refieren a la movilidad, por si hubiese que limitarla entre provincias. Finalmente habrá un último panel con los indicadores socioeconómicos para conocer la enorme repercusión que la pandemia ha tenido sobre la economía y el empleo.

Por el momento no habrá movilidad entre provincias o islas hasta alcanzar la nueva normalidad y la movilidad de los ciudadanos se hará en función del control de la epidemia en cada provincia y a la velocidad que permita la situación sanitaria de esa zona, de acuerdo con criterios objetivos.

El paso de una fase a otra en cada lugar se determinará en función de las capacidades estratégicas de su sistema sanitario de atención primaria y hospitalario; su situación epidemiológica; la implantación de medidas de protección colectiva en comercios, transportes, centros de trabajo y en cualquier espacio público, y en los datos de movilidad y económicos.

En el gráfico adjunto se detallan las condiciones y horarios de movilidad de los ciudadanos en la fase inicial o fase 0, en la que actualmente se encuentra Extremadura.