La consejera de Educación y Empleo de la Junta de Extremadura, Esther Gutiérrez Morán, ha iniciado una ronda de reuniones con la comunidad educativa para analizar y aminorar los efectos de la aplicación de la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE).

Gutiérrez Morán ha explicado que el objetivo es con las aportaciones de los directores y los docentes trabajar en las incorporaciones que se añadirán al decreto que regule el próximo curso 2016/2017 para suavizar los efectos de esta norma en la región.

“Todos sabemos que es una ley orgánica, que hay que cumplirla, pero también que ellos sepan la situación que nos hemos encontrado”, ha señalado la titular de Educación, quien ha insistido en que la Junta de Extremadura se ha encontrado con un decreto por el que se establece para el curso 2015/2016 el currículo de Educación Secundaria Obligatoria y de Bachillerato (el decreto 127/2015, de 26 de mayo), aprobado por un gobierno en funciones, que no permite ahora realizar cambios que suavicen los efectos de la LOMCE.

Esther Gutiérrez Morán ha reiterado que su departamento quiere contar con las aportaciones de la comunidad educativa de cara a nuevos pactos y a la posibilidad de modificar ese decreto a lo largo del año.

La consejera ha explicado que estas aportaciones servirán además para trazar una estrategia a nivel nacional contra la LOMCE, norma a la que ha augurado un recorrido corto.

“Haremos todo lo posible para que esta Ley no se lleva a cabo”, ha concluido Gutiérrez Morán, quien ha sentenciado que es preciso contar con las pautas y un trabajo elaborado por la región, que ayude a hacer aportaciones para la mejora de ese posible pacto educativo.

Gutiérrez Morán ha mantenido hoy sendas reuniones en Cáceres y en Mérida con los directores de Institutos de Educación Secundaria (IES) de la provincia cacereña y pacense.