Agentes del Cuerpo Nacional de Policía procedieron a la detención de dos personas por su presunta implicación en un delito contra la salud pública, concretamente por tráfico de sustancias estupefacientes.

La investigación fue desarrollada durante el pasado mes de mayo, cuando los agentes adscritos a la Brigada de Policía Judicial de la Comisaría Provincial de Cáceres, tuvieron conocimiento de que una vivienda del casco antiguo de Cáceres, próxima a la Plaza Mayor, se utilizaba como punto de distribución entre consumidores habituales de cocaína y heroína. Las indagaciones y vigilancias practicadas por los investigadores permitieron acreditar la actividad ilícita que los detenidos estaban ejerciendo, tarea que llevaban a cabo adoptando todo tipo de precauciones para tratar de eludir la actuación policial, pues no en vano ya habían sido detenidos en el mes de noviembre del año pasado por esta misma actividad en otro domicilio también del casco antiguo de la ciudad.

Como tapadera de su ilícita actividad, y al mismo tiempo como medio para la distribución de la droga, habían abierto un establecimiento de hostelería en el que, mediante el menudeo, repartían a los consumidores habituales la sustancia estupefaciente. Fue a la puerta de este local donde los agentes policiales consiguieron la detención de una persona, a la que se le incautaron, ocultas entre sus ropas, seis "papelinas" listas para su venta, procediendo posteriormente a la detención de su compañero sentimental.

En el registro domiciliario que se llevó a cabo con la preceptiva autorización judicial, se intervinieron 70 gramos de hachís (7 bellotas y media), dos frascos casi completos de "Trankimazin" y "Tranxilium", 9.1 gramos de cocaína, 4.5 gramos de heroína, 2.6 gramos de mezcla heroína-cocaína y 20 papelinas de mezcla listas para su distribución, además de útiles para la distribución, elaboración y venta, tales como báscula de precisión, tijeras, recortes circulares de plástico para las papelinas y 508.98 € en efectivo.

Los detenidos son un hombre de 55 años de edad y una mujer de 39 años, ambos con antecedentes policiales, quienes tras la instrucción del preceptivo atestado policial, pasaron a disposición de la autoridad judicial, que acordó su ingreso en prisión.