El Gobierno extremeño da el primer paso y se reunirá esta semana con IU y PSOE para buscar puntos de encuentro sobre los Presupuestos Generales de Extremadura (PGEX). Para el presidente Monago "los extremeños necesitan que nos centremos más en lo que nos une que en lo que nos separa"

El presidente del Gobierno de Extremadura, José Antonio Monago, ha encargado a la vicepresidenta, Cristina Teniente, y al consejero de Economía y Hacienda, Antonio Fernández, que inicien esta semana el diálogo con Izquierda Unida y PSOE para fijar puntos de encuentro sobre los Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma para 2012.

Ante las enmiendas a la totalidad presentadas por el PSOE y por Izquierda Unida, el presidente del Gobierno de Extremadura quiere que se abra una etapa de información y análisis para que en conjunto se consigan en las próximas semanas los mejores presupuestos para el momento de gravedad que atraviesa Extremadura.

El presidente del Gobierno extremeño ha insistido en la importancia del cumplimiento del techo de déficit al que están obligados todos los estados miembros de la zona euro. Su cumplimiento es el principal objetivo de los Presupuestos presentados en el Parlamento el pasado lunes.

"Los Presupuestos presentados por el Gobierno de Extremadura son los presupuestos del rigor y la verdad. Establecen por primera vez en Extremadura un techo de gasto y no contemplan ingresos ficticios. Los extremeños necesitan que nos centremos más en lo que nos une que en lo que nos separa", ha afirmado el presidente Monago. Ante la grave situación que atraviesa España, en general, y Extremadura, en particular, el presidente además considera que es tiempo de arrimar el hombro y trabajar todos para ayudar a Extremadura.

Por último, el presidente del Ejecutivo extremeño apela a la responsabilidad y el sentido de estado de Izquierda Unida y PSOE para alcanzar los acuerdos necesarios que permitan a Extremadura contar con unos presupuestos ajustados a la realidad. En este sentido, además, el Presidente ha pedido mirar a largo plazo y dejar a un lado intereses partidistas en todo el proceso.