La Policía Nacional ha detenido a nueve personas por un delito de falsificación documental y asociación ilícita, tras haber desarticulado dos organizaciones dedicadas a la falsificación de diplomas de seguridad privada que operaban en varias localidades de la región.

Se trata de la operación "Cantera", que se ha saldado con el arresto de ocho hombres y una mujer en distintas localidades de Extremadura y Madrid por su supuesta participación de estos hechos, según informa la Delegación del Gobierno.

Funcionarios de la Comisaría de Cáceres iniciaron la investigación en marzo al tener conocimiento, tras una denuncia, de que se estaban expidiendo diplomas falsos de distintas especialidades de seguridad privada, con el anagrama de una academia de esta ciudad.

Estos diplomas eran vendidos posteriormente a un precio inferior al que cuesta obtenerlo en las academias habilitadas al efecto, logrando con ello "un gran beneficio económico".

En un primer momento se logró detener a cinco personas -P.H.P., de 59 años; M.M.P., de 40 años; T.S.R., de 45 años; D.S.S., de 48 años, y A.I.G.G., de 45 años- en las localidades de Cáceres, Mérida y Don Benito.

Estos individuos formaban un grupo con una estructura jerarquizada, con división de tareas y funciones, todo ello para el desarrollo de su ilícita actividad, a los que lograron intervenir tres diplomas falsificados.

En el transcurso de las pesquisas los investigadores se percataron que otra organización con el mismo "modus operandi" estaba operando en localidades cercanas a Don Benito.

Logró también su desarticulación completa tras detener a cuatro personas más -J.J.I.M., de 48 años; A.M.P.B., de 49; J.R.M., de 40, y T.G.A., de 31 años- y recuperar otros treinta títulos fraudulentos.

Todos los detenidos estaban relacionados con el ámbito laboral de seguridad privada y ocupan cargos como jefe de estudios y profesor de academias de seguridad privada, gerentes, jefes de seguridad y de servicios de empresas de seguridad privada y vigilantes de explosivos.

Estos últimos eran los que se encargaban de publicitar sus ofertas y captar a los compradores, que en su amplia mayoría eran trabajadores de las canteras de Quintana de la Serena (Badajoz).