La ONG Amnistía Internacional recoge en una exposición 30 fotografías que retratan a otros tantos activistas que han destacado por su lucha a favor de los derechos humanos.

La exposición, titulada 'Defensores: el testimonio obstinado' puede verse en la sala 'Vaquero Poblador' de la Diputación de Badajoz hasta el próximo 9 de mayo.

La muestra es obra de Sofía Moro, fotógrafa madrileña que ha dedicado parte de su vida a una labor periodística ingente y comprometida con los más desfavorecidos, según señala la Diputación de Badajoz.

En la inauguración de esta exposición, estuvieron presentes la delegada de Amnistía Internacional en Badajoz, Ángela Rivera; la defensora de derechos humanos Laura Bonilla; el director del Área de Cultura de la Institución Provincial, Francisco Muñoz; la responsable de la sala de exposiciones, Lourdes Román, y la delegada del Gobierno en Extremadura, Carmen Pereira.

En su intervención, Francisco Muñoz destacó la importancia de la muestra por sí misma, "una magnífica galería fotográfica de 30 rostros, de 30 personas comprometidas con los derechos humanos en el mundo, en una realidad donde las crisis y las pandemias son mundiales y se deben entender los derechos humanos en su globalidad. Y estas historias aquí representadas son algunos de sus mejores ejemplos".

Así, entre las historias retratadas se descubren testimonios de refugiados políticos, homosexuales, activistas por los derechos que han tenido que abandonar sus países o sufren persecución por su lucha pacífica en pro de los derechos humanos.

Según explicó Ángela Rivera, su labor "desafía a gobiernos, poderosas élites políticas y económicas, por lo que están en serio riesgo de sufrir amenazas de muerte, detenciones arbitrarias, denuncias falsas, homicidios y en muchas ocasiones abandono de sus hogares".

Resaltó Rivera que "sus acciones rompen el muro de silencio de los gobiernos responsables", y es a esas a las que "está dedicada esta exposición, personas que actúan pacíficamente para defender los derechos de los pueblos".

El testimonio personal de Laura Bonilla cerró el acto inaugural. Bonilla arribó a España tras amenazas de los paramilitares colombianos. Dirigía en su país el observatorio 'Nuevo Arco Iris' donde trabajaba como investigadora del conflicto armado.

Relató que tanto ella como sus compañeros luchan por defender los entornos y personas envueltos en conflictos bélicos y terroristas. Tras resumir la situación en Colombia, con más de 60 años de conflicto, confesó que en su país "se ha polarizado en dos, los que están a favor de la muerte y los que lo estamos por la paz".

"Hemos tenido más de 400 masacres en 20 años y más de 300 secuestros. Gran parte de la selva amazónica está sembrada de minas antipersonas, la tierra está un 30% más concentrada que hace dos décadas y ya son 250.000 hectáreas las utilizadas para la plantación de coca. En este marco todavía hay personas que tienden puentes al diálogo, a la salida del conflicto pacíficamente", explicó Bonilla.

En su opinión, la característica de los conflictos en la actualidad "es que no son entre estados o contra el terrorismo sino contra la población civil. Esto nos moviliza para apelar a esa sociedad, a que aúnan fuerzas para luchar por los derechos, por los derechos de todos nosotros".

La exposición 'Defensores: el testimonio obstinado' podrá visitarse en la Diputación de Badajoz hasta el próximo 9 de mayo.