La empresa Toldos Vázquez de Almendralejo debe indemnizar con 22.000 euros a las personas afectadas por el derrumbamiento de una cornisa, situada en la calle Real, en 2007, y que cayó tras colocarse unos toldos del proyecto Centro Comercial Abierto.

Según la agencia Efe, la sentencia del juzgado de instrucción número 3 de Almendralejo falla que la empresa encargada de colocar los toldos tendrá que sufragar los daños ocasionados, ya que han quedado demostradas algunas deficiencias en su montaje.

El presidente actual de la Asociación de Empresarios de la Zona Centro de Almendralejo (ASEMCE), Juan Bote, declara sentirse satisfecho por la sentencia. El fallo llega después de que la empresa encargada de gestionar los fondos recibidos por este colectivo de la Junta de Extremadura, Eurdesa, adelantara esa indemnización a los afectados y reclamara judicialmente esa cantidad a la empresa encargada de la confección y montaje de los toldos.

Bote recuerda que unas dos o tres personas sufrieron heridas leves por la caída al suelo de parte de la cornisa en la que se sujetaban los toldos. También causó algunos desperfectos en el edificio de la acera de enfrente.

Sin embargo, la indemnización será para pagar los daños materiales y los psicológicos de las personas afectadas por este hecho, que sucedió en una tarde tormentosa, en la que los vientos llegaron a tener una gran velocidad.

Por último, Bote asegura que los toldos, propiedad de ASEMCE, gracias a la subvención por el Centro Comercial Abierto, están guardados y a la espera de que se diseñe un nuevo proyecto para colocarlos en algún lugar donde puedan mejorar la estética y las prestaciones de la zona comercial. No se instalarán hasta que dispongan de nuevas subvenciones, puesto que esa fase es la más costosa.