La Consejería de Educación, los sindicatos y padres de alumnos pondrán en marcha medidas para ampliar el cumplimiento del Plan Regional para la Convivencia Escolar. Entre ellas destacan la creación de un protocolo de actuación para los llamados casos de violencia escolar de baja intensidad, es decir, insultos, interrupciones constantes en clase o menosprecios a los docentes, para que se resuelvan de manera inmediata, con medidas correctoras o coercitivas.

Además, la región contará con un estudio específico que refleje la realidad del sistema educativo extremeño e incida en la conflictividad en las aulas.

La consejera de Educación, Eva María Pérez, declaró en Badajoz que los sucesos que se están registrando en los centros casos en este inicio de curso son "hechos aislados y situaciones anecdóticas".

Por su parte, el secretario general del PP de Extremadura, César Díez Solís, valoró ayer que sucesos como los de Helechosa o los anteriores son consecuencia del "fracaso de las medidas por la convivencia" puestas en marcha por la Junta.