Un ataque con gasolina origina un incendio de madrugada en una vivienda de un vecino de Cilleros
Un vecino de Cilleros, trabajador del ayuntamiento, Ángel Ramajo, ha sufrido un ataque en su vivienda con varias latas de gasolina que han provocado un incendio y han dañado el interior del inmueble. Un ataque que podría haber acabado en desgracia ya que los hechos se produjeron durante la madrugada cuando los habitantes de la casa, Ángel y su mujer, dormían.
Afortunadamente, la mascota que tiene la pareja, un gato, alertó al matrimonio y pudieron rápidamente sofocar las llamas a la entrada de la vivienda. Todo se remonta a la madrugada del pasado martes, alrededor de las 02.30 horas, y así lo explicaba en Radio Interior la víctima.
La investigación está abierta en varios frentes y los agentes de la policía científica acudieron de inmediato pero aún no se ha localizado al autor o autores ni tampoco se ha practicado ninguna detención. Ramajo considera que no tiene ningún problema con ninguno de sus vecinos, es funcionario del ayuntamiento y ejerce además las tareas de secretario de paz, por lo que no entiende como alguien puede haber cometido este ataque y haber puesto en riesgo su vida y la de su mujer.
No es el primer suceso de estas características que sucede en Cilleros. Hace algo más de dos años, en septiembre del 2007, la sede del Partido Socialista del municipio y una vivienda aledaña resultaron dañadas con el mismo modus operandi.
En aquella ocasión también el incendio que se originó alrededor de las dos de la madrugada y provocó cuantiosos daños materiales tanto en el local de la formación como en la librería que se encuentra en los bajos del mismo inmueble.
Todos los indicios apuntan a que el fuego fue intencionado al encontrarse restos de gasolina junto a la puerta de acceso a la sede del PSOE, situada en la Avenida de la Constitución. El autor o autores arrojaron gasolina en las escaleras y después se prendió fuego, lo que causó "importantes daños materiales". Entonces se atribuyó a un conflicto político, pero no se consiguió resolver el delito.