El Ayuntamiento de Villanueva de la Serena es, junto a otras siete ciudades españolas, embajador del Proyecto Vigilantes del Suelo. A través del Programa Ciudades Saludables y Sostenibles, va a participar en “Vigilantes del suelo” del proyecto de Ciencia Ciudadana y que se desarrolla en el Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA) y la Fundación Ibercivis, financiado por la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT)-Ministerio de Ciencia e Innovación.

Es la segunda vez que el Ayuntamiento desarrolla un proyecto de estas características, ya que meses atrás fue el de “Vigilantes del aire”.

En esta actividad en concreto, de lo que se trata es de evaluar el estado de salud del suelo, y el principal objetivo es estimular la participación ciudadana en actividades científicas. Un proyecto dirigido a estudiantes, profesorado, personas del ámbito rural, asociaciones sin ánimo de lucro; así como al público en general.

El que este proyecto se desarrolle en varios municipios del país, permitirá incrementar la diversidad en los resultados obtenidos y ampliará el ámbito del proyecto. Además, los resultados obtenidos podrán ser alojados y geoposicionados, a través de una aplicación móvil, que contribuirá a crear el mapa de calidad de nuestros suelos.

Para ello, se ha creado un kit de análisis para que cualquier persona pueda valorar el estado de salud del suelo a través de indicadores cualitativos determinados de manera sencilla. Entre ellos, la diversidad de macrofauna (escarabajos, hormigas, arañas, caracoles, entre otros), el número de lombrices, el tiempo de infiltración del agua, la resistencia del suelo a la penetración, el pH, la cantidad de materia orgánica a través de una reacción con agua oxigenada y la cubierta vegetal. Este kit incluye herramientas para realizar el muestreo y una guía didáctica con indicaciones sobre cómo realizarlo e interpretar los resultados.

Desde este proyecto se pone en valor la importancia del buen estado de salud de los suelos, ya que los suelos sanos contribuyen a lograr la neutralidad climática y la resiliencia al cambio climático, desarrollar una (bio)economía limpia y circular; además de revertir la pérdida de biodiversidad, salvaguardar la salud humana, detener la desertificación y revertir la degradación del suelo. En definitiva, este proyecto busca concienciar sobre la salud de los suelos y su importancia en el contexto del cambio climático.

En los últimos años la ciencia ciudadana ha aumentado su presencia en diversas áreas del conocimiento, como los estudios de monitorización de la calidad del aire o del agua, pero su aplicación en la edafología está todavía poco explorada. Por ello, con este proyecto se busca dotar a la sociedad de herramientas y metodologías fiables que les permitan evaluar la calidad de los suelos de su entorno de un modo sencillo.