Asaja Extremadura ha denunciado la falta de compromiso y del Ministerio de Agricultura, a través de Enesa, y de Agroseguro, con todo su ‘pool’ de compañías que lo integran, hacia el sector cerecero extremeño.

En la mañana de ayer tuvo lugar una reunión entre las organizaciones profesionales agrarias, la Junta de Extremadura y los representantes del Gobierno, representados por ENESA y Agroseguro.

Frente a la petición unánime del campo extremeño y de la administración regional de considerar como excepcionales los daños producidos por las lluvias torrenciales esta campaña en la producción de cereza, ambas compañías siguen haciendo «oídos sordos» y rechazaron esta petición.

Ángel García Blanco, presidente de Asaja Extremadura, ha criticado que ambas compañías “nuevamente vuelvan a mirar para otro lado ante una petición totalmente lógica y unánime del sector” y recuerda que “esta misma excepcionalidad se adoptó para Cataluña por un problema de heladas en frutales en el año 2022, pero desgraciadamente una vez más tenemos que comprobar cómo lo que pasa en Cataluña es tratado por el gobierno de Pedro Sánchez de un modo muy diferente a las desgracias que le ocurren a los extremeños”.

Asaja Extremadura recuerda que el actual seguro para la cereza de Cáceres lleva funcionando desde el año 2019, “con lo que si no se eliminan los daños excepcionales de 2023 arrastrarán una losa importante que afectará a todos los asegurados, tanto a los que han contratado el seguro como a los que quieran incorporarse al mismo”.

Ante esta situación, “que nos hace pensar que el Gobierno Central lo único que quiere es que desaparezca este seguro”, solicitan el apoyo institucional de la Junta de Extremadura para la mejora de un seguro “que hasta ahora se ha demostrado totalmente insuficiente y que no cubre la mayor parte de los daños que se producen en este cultivo”, concluye Ángel García Blanco.

En la foto de la noticia, cereza extremeña.