Más de 700 personas, entre antiguos alumnos y extrabajadores, han asistido este sábado a los actos de conmemoración del 70º aniversario del colegio San Francisco Javier de Fuente de Cantos, uno de los centros educativos con más solera de Extremadura.

Ha sido una jornada intensa de emociones, recuerdos y reencuentros entre personas de generaciones muy distintas pero unidas por la añoranza de aquellos años de infancia y adolescencia.

Las actividades han dado comienzo a las once de la mañana, con la bienvenida oficial del equipo directivo, a la que siguió la apertura institucional en el salón de actos, que contó con la presencia de Fernando Blanco, secretario general de Presidencia de la Junta de Extremadura y antiguo alumno de este colegio.

Posteriormente los asistentes, venidos desde todos los puntos de España, han asistido a la representación de la obra teatral ’70 años en escena’, escrita y dirigida por José Rodríguez Pinilla, y que hizo un recorrido por las distintas fases históricas del San Francisco Javier.

A su término, se ha llevado a cabo la plantación simbólica de un árbol, actividad que forma parte del programa ‘El Árbol de Tu Vida’, una iniciativa del colegio que fomenta los valores de la sostenibilidad y el desarrollo compatible con el medio ambiente, a través de plantaciones, recuperación de agua de lluvia, eficiencia energética, autoconsumo y economía de proximidad, entre otras cuestiones.

Tras esto, ha sido el momento de la comida de convivencia, cuyo escenario fue el polideportivo del colegio y donde a la comida y bebida se han unido actuaciones en directo, recena y diversas sorpresas. La organización se ha encomendado a la firma local especializada Mi PrincisapoWeddingPlanner, dentro de la política de la nueva dirección del colegio de recurrir, siempre que sea posible, a empresas locales para cubrir sus necesidades, como forma de contribuir a la economía local.

El colegio San Francisco Javier, fundado en 1953 por la congregación de Misioneros de la Preciosa Sangre, ha vivido distintos avatares, que tuvieron su punto álgido hace unos pocos años cuando la congregación abandonó el centro y su continuidad pendía de un hilo. Entonces, un grupo de profesores dieron un paso al frente, con el apoyo de la Junta de Extremadura, y se constituyeron en sociedad para gestionar el colegio, adaptado ya a los nuevos tiempos.