La Junta de Extremadura ha asegurado que está preparado un recurso ante la resolución de la Dirección General de Agua del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico que ordena la demolición de la presa de Valdecaballeros sobre el río Guadalupejo al ser parte interesada en el procedimiento y no haber sido consultadas sobre esta decisión.

Esta presa fue construida para la refrigeración de la central nuclear pero nunca cumplió su función, al no haberse puesto en marcha. No obstante, las concesiones de aprovechamiento hidráulico de las empresas, antiguas propietarias de la misma, seguían vigentes.

Hay que destacar que los municipios de Valdecaballeros y Castilblanco se abastecen de este pantano. La citada resolución de la Dirección General del Ministerio elimina las concesiones, pero también ordena el derribo de la presa, sin haber consultado a la Junta de Extremadura, que es la actual propietaria de los terrenos de la central nuclear. También señala esta resolución que las tomas para el abastecimiento de las dos poblaciones se trasladen al pantano de Puerto Peña.

Esta misma jornada ha habido una reunión entre la vicepresidenta primera y consejera de Hacienda y Administración Pública, Pilar Blanco-Morales; la consejera de Transición Ecológica y Sostenibilidad, Olga García; y el director de Patrimonio y Contratación Centralizada, Juan Pedro León; a los alcaldes de Valdecaballeros, Gregorio Rodríguez Dueñas, de Castilblanco, María Ángeles Merino Bermejo, y de Alía, Cristina Ramírez Rubio, en una reunión mantenida este lunes.

Asimismo, durante el encuentro, los alcaldes de la zona han manifestado su preocupación por el derribo de la presa, dado el daño medioambiental que puede producir a la fauna y flora existente en el entorno, pero también por el riesgo del abastecimiento para la población, ya que el traslado de las tomas de agua, de producirse, conllevaría un recurso de menor calidad.