Miles de conductores de toda Extremadura han aprovechado las últimas horas del año para llenar los tanques de combustible de sus vehículos al anunciarse que desde el 1 de enero desaparece la ayuda estatal de 20 céntimos por litro aprobada por el Gobierno hace nueve meses.
La inusual imagen se ha producido en todas las estaciones de servicio de la región con independencia de la compañía petrolífera a la que pertenezcan. El Consejo de Ministros decidió hace cuatro días aprobar la eliminación de la bonificación a los carburantes para todos los vehículos tal y como venía sucediendo hasta ahora.
Desde el 1 de enero la ayuda será de aplicación exclusivamente para profesionales, es decir, transportistas por carretera, agricultores, ganaderos y pescadores. Los transportistas contarán con esta ayuda hasta el próximo 31 de marzo. A partir de esta fecha la bonificación será de 10 céntimos en el segundo trimestre del año.
Los conductores han colapsado las gasolineras para aprovechar la bonificación de 20 céntimos por litro de combustible que se venía aplicando hasta ahora. Las colas comenzaron el día 29, se incrementaron la jornada siguiente y muchos de los usuarios lo dejaron para la jornada de Nochevieja.
Aunque se temía que el incremento de los desplazamientos propio de estas fechas podía provocar el desabastecimiento en algunas estaciones de servicio debido a un exceso de la demanda, las petrolíferas han reaccionado para evitar esta circunstancia. Las grandes compañías del sector ya han anunciado medidas alternativas y la primera en mover ficha ha sido Repsol, que ha confirmado una bonificación de 10 céntimos por litro a partir del día 1 de enero en todas sus estaciones de servicio. Esta medida ya ha sido anunciada por otras petroleras para fidelizar a sus clientes y compensar en parte el fin de la bonificación estatal.
