La Guardia Civil ha detenido a un hombre de 54 años de edad, vecino de Moraleja, como presunto autor de 19 incendios forestales ocurridos en la comarca de Sierra de Gata durante los años 2021 y 2022, según la información oficial que se ha dado a conocer este sábado.

Al detenido se le acusa de provocar los incendios en zonas de los términos municipales de Moraleja, Calzadilla, Santibáñez el Alto, Guijo de Galisteo, Torre de Don Miguel, Gata, Villasbuenas de Gata y Torrecilla de los Ángeles, todos ellos situados en el norte de la provincia de Cáceres.

Agentes de la Guardia Civil pertenecientes al Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Comandancia de Cáceres han procedido a su detención después de concluir las investigaciones que comenzaron en el verano de 2021, cuando se detectó un incremento notable de pequeños incendios forestales, incendios agrícolas y otros conatos. Todos los incendios tenían algo en común, y es que se originaron en lugares muy próximos a vías de comunicación, principalmente a la conocida popularmente como la “carretera del Borbollón”, que une Moraleja con el embalse del Borbollón.

Las pesquisas practicadas con ocasión de todos ellos permitieron a los investigadores centrar las sospechas iniciales en el conductor de un vehículo tipo todo camino que había sido visto justo antes de los incendios en sus inmediaciones. En total, y durante el verano de 2021, se originaron 15 incendios forestales reconocidos oficialmente por el Seprona, y de todos ellos se realizó la correspondiente inspección técnico ocular.

Si algo llamó la atención de la Guardia Civil es que la reiteración de incendios forestales ocurridos durante los meses de verano se originaban principalmente en el término municipal de Santibáñez el Alto. Esto hizo que se reactivara la investigación por parte de los agentes de la Unidad de Protección de la Naturaleza (Uprona) de la Comandancia de Cáceres, quienes volvieron a detectar movimientos del mismo vehículo sobre el que recaían las sospechas iniciales.

Durante varios días del mes de agosto se originaron varios incendios forestales claramente intencionados que se registraron en distintos enclaves de los términos municipales de Santibáñez el Alto, Gata, Villasbuenas de Gata y Torre de Don Miguel. El último de ellos obligó a la declaración del nivel 2 de emergencias del Plan Infoex debido a la peligrosidad que suponía para personas y bienes, ya que el avance de las llamas obligó a la evacuación de 800 personas del municipio.

CERCA DE LA CARRETERA

La característica común de los incendios que fueron analizados es que todos tenían algo en común, y era el hecho de que los puntos de inicio quedaban localizados a escasos metros de la plataforma asfaltada de las vías de comunicación. Este detalle fue determinante para considerar que todos los incendios tuvieron un origen intencionado.

La declaración de un nuevo incendio forestal, ocho días después del ocurrido el día 2 de agosto en el término municipal de Santibáñez el Alto, y a solo un kilómetro de distancia en línea recta de este, también en el margen de una vía de comunicación, reforzó la hipótesis de la intencionalidad. En todos ellos los agentes detectaron indicios que ponían de relieve la presencia y, por consiguiente, la participación del propietario y conductor habitual del vehículo del que se venía sospechando desde el principio.

La Guardia Civil asegura que se trató de una investigación muy compleja, pues fue necesario analizar el código alfanumérico que conforma la matrícula del vehículo sospechoso y, con ello, proceder a la identificación de su propietario. Con el cúmulo de indicios y pruebas recabados, el vecino de Moraleja ha sido detenido acusado como presunto autor de un delito continuado de incendios forestales, por lo que ha sido puesto a disposición de la autoridad judicial en Coria.

Uno de los aspectos que ha contribuido a hacer la investigación más compleja ha sido la ausencia de testigos en los lugares en los que se originaron los incendios, lo que obligó a encauzar el grueso de las investigaciones a la obtención de indicios para su esclarecimiento. Además los agentes tuvieron dificultades a la hora de investigar en el entorno de las personas del detenido, que expresaron su temor a hablar basándose en posibles represalias.